La aprobación de la nueva ley de 'telecos', amenazada
El fin de la legislatura puede impedir que se apruebe la norma que adapta varias directivas comunitarias
La nueva Ley General de Telecomunicaciones podría quedar varada. Distintas fuentes parlamentarias hablan de "entierro" o de "la no ley". El motivo principal por el que esta nueva norma puede quedar parada hasta la próxima legislatura es el fin del actual periodo de sesiones en el Congreso y el Senado como consecuencia del adelantamiento de las elecciones generales al 20 de noviembre.
El Ministerio de Industria mantiene su posición de que hará todo lo posible por que la ley se apruebe, tal y como manifestó el ministro, Miguel Sebastián, a principios de agosto. Fuentes parlamentarias señalan que los representantes socialistas en la Comisión de Industria del Congreso, donde se está tramitando la ley, van a dialogar con los representantes del resto de formaciones políticas para tratar de acelerar el proceso. Por su parte, fuentes del PP señalan que es muy complicado que esta norma entre en vigor durante esta legislatura.
En estos momentos, la ley está en la fase de comisión del Congreso, posteriormente, una vez debatidas todas las enmiendas, debería ser votada en pleno. Después tendría que ir al Senado para volver al Congreso para su ratificación. La cuestión, según coinciden distintas fuentes del sector, es que las Cortes se van a disolver a final de septiembre. Fuentes jurídicas señalan que podría optarse por aprobar la ley mediante un procedimiento de tramitación urgente, escenario que debería ser pactado por todos los grupos parlamentarios. Aunque, advierten que, con la reforma constitucional en proceso, ahora no es el mejor momento para llegar a un acuerdo. En los próximos días, el proceso debería quedar aclarado.
El texto trata la neutralidad de la red y las competencias de los reguladores
Directivas
Lo cierto es que, según fuentes del sector, esta ley tiene un gran calado puesto que traspone las directivas europeas de Mejor Regulación, de Derechos de los Ciudadanos y el reglamento del Organismo de Reguladores Europeos de las Comunicaciones Electrónicas, que forman el Paquete Telecom. La no aprobación provocaría un retraso significativo de diversas materias claves para el sector.
Entre otras cuestiones, la norma prevé la creación de un marco más adecuado para la inversión en las redes de nueva generación que permiten el acceso a internet a velocidades superiores a los 100 mbps. Además, establece un escenario por el que los usuarios tendrán derecho a recibir más información de los operadores con los que tienen contratados los servicios de telefonía.
Además, la ley trata la cuestión sobre la neutralidad de la red o la organización de competencias de los organismos reguladores. En la presentación de la norma, Industria indicó que la ley vendrá a reforzar las competencias de la CMT. Entre otros puntos contempla la opción de que "en los supuestos de fallo persistente de la competencia en el mercado, la CMT podrá imponer al operador con poder significativo en el mercado (Telefónica, en el caso de la red fija en España) la separación funcional entre su red y los servicios minoristas que presta". Una situación similar a la que se dio en Reino Unido con BT.
En cualquier caso, el tiempo corre en contra de la ley. En caso de no aprobarse ahora, tendrá que hacerse en la próxima legislatura.
El Estado, titular del espectro
Otra de las cuestiones de la Ley General de Telecomunicaciones es la titularidad del espectro radioeléctrico. La norma deja claro que el espectro es un bien de dominio público, cuya titularidad y administración corresponden al Estado.Por otro lado, en términos comunitarios, la ley indica que viene a "contribuir al desarrollo del mercado interior de servicios de comunicaciones electrónicas en la UE".