El pesimismo de Ben Bernanke sentencia otra jornada bajista en las Bolsas
Las dudas han dado paso a las caídas. Tras vivir una mañana de incertidumbres, las palabras de Ben Bernanke dejaron vía libre a los números rojos. El presidente de la Reserva Federal lanzó un mensaje menos optimista de lo que se esperaba al señalar que las sostenidas subidas del precio del crudo podría ser una amenaza para el crecimiento y para la estabilidad de la inflación. Además, Bernanke explicó que continúan los indicios de crecimiento, pero detalló que por el momento no se observa un crecimiento sostenido en el empleo.
En este contexto, y con el lastre adicional de un petróleo, que continúa su escalada y se cambia ya a 115 dólares, y un oro en máximos históricos, al cerrar en 1.431.2 dólares la onza, las Bolsas optaron por caer. Wall Street, que cerró con un descenso del 1,57% en el S&P, volvió a marcar el ritmo de Europa. El Ibex perdió un 0,82%, hasta los 10.761 puntos, mientras que en el resto de las plazas los recortes fueron parecidos.
En el mercado español, los bancos fueron los principales damnificados. Los dos grandes, Santander y BBVA, restaron un 1,73% y un 1,39%, respectivamente. Popular, por su parte, perdió un 1,51%. Más suerte tuvo OHL. Sus títulos ganaron un 3,99% tras anunciar que su beneficio aumentó en 2010 un 25,3%.
El volumen de negociación de la Bolsa española durante los dos primeros meses del año ascendió a 165.220 millones, un 1% más que en igual periodo de 2010. En febrero se situó en 66.445 millones, con un descenso 13%. La negociación de futuros sobre acciones creció el pasado mes un 69%, mientras que en deuda corporativa se registró un récord mensual, con cerca de 650.000 millones.