La banca central analizará el endeudamiento europeo y los tipos de cambio
Los gobernadores de los bancos centrales del G-10 se reúnen mañana en la ciudad suiza de Basilea para discutir sobre la situación actual de la economía mundial.
Bajo los auspicios del Banco de Pagos Internacionales (BPI), cuya sede se encuentra en Basilea, los bancos centrales de economías avanzas y emergentes analizarán cuestiones como el endeudamiento de Europa y los tipos de cambio de divisas.
La reunión en Basilea precede a la cumbre de gobernantes del G20 que se celebrará en Seúl el 11 y 12 de noviembre.
Los principales bancos centrales del mundo llevan a cabo diferentes políticas monetarias.
La Reserva Federal estadounidense (Fed) va a relajar más su política monetaria al comprar deuda pública por valor de 600.000 millones de dólares durante los próximos once meses.
Sin embargo, el BCE va a mantener su retirada gradual de las medidas extraordinarias aplicadas para afrontar la crisis financiera y económica, como la inyección de liquidez ilimitada con la que apoya a los bancos.
El BCE también mantiene su programa de compra de deuda pública con el que apoya a países europeos que atraviesan actualmente dificultades y están siendo castigados en los mercados de bonos.
El endeudamiento total de España fue en 2009 del 279,3 por ciento del PIB (159,6% en 1999), algo por encima del 249,1 por ciento del conjunto de la zona del euro.
El endeudamiento total de Irlanda fue en 2009 del 389 por ciento del PIB, el de Portugal del 336,8 por ciento y el de los Países Bajos del 282,9 por ciento.
El endeudamiento total de EEUU fue el pasado año del 265,7 por ciento, según cifras del BCE.
El Banco de Japón (BoJ) mantuvo el viernes los tipos de interés virtualmente en cero, entre el 0 y el 0,1 por ciento, con la intención de reactivar la economía y detalló su plan de compra de bonos, fondos fiduciarios y activos de renta variable, medida que frenará la apreciación del yen.
El gobernador del BoJ, Masaaki Shirakawa, ha confirmado que asistirá a la reunión en Basilea.
La compra de deuda de la Fed, que tiene los tipos entre el 0 y el 0,25 por ciento, disparó esta semana al euro frente al dólar hasta rozar los 1,43 dólares, su nivel máximo desde enero del pasado año.
El billete verde se depreció también frente a las divisas de otros socios comerciales.
El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, ofrecerá, como portavoz de los gobernadores de los bancos centrales del G10, una rueda de prensa tras el encuentro para facilitar los detalles de las discusiones.
Tras dejar las tasas inalteradas en el 1 por ciento para la zona del euro, Trichet se mostró convencido el pasado jueves de que EEUU no sigue deliberadamente una estrategia de un dólar débil.
El secretario del Tesoro estadounidense, Tim Geithner, dijo ayer que EEUU no va a usar el dólar como herramienta para tener ventajas competitivas comerciales y reiteró su apoyo a un dólar fuerte.
El BPI, que fue fundado el 17 de mayo de 1930 y se reúne con carácter bimestral en su sede, fomenta la cooperación monetaria y financiera internacional y actúa como banco para los bancos centrales que son sus clientes.