Una cuota fija a cambio de un límite de kilómetros
Las arrendadoras fuerzan al máximo la capacidad de control de gastos del renting para no perder contratos.
Ante la caída de la demanda, las empresas que alquilan coches están tratando de ganar terreno haciendo hincapié en los beneficios del ahorro y el control del gasto frente al mayor coste que acarrea la propiedad directa de una flota. Con ese fin, están ofreciendo contratos que aseguran una mensualidad fija en relación con un límite de kilómetros. ING Car Lease lo llama Renting Cerrado. "Es un producto que llevamos 11 años comercializando, pero cuyos valores destacan más en crisis", comenta Jorge Bautista, director general del grupo, cuya facturación aumentó desde los 120 millones de euros a los 206 millones, aunque esta última cifra incluye las ventas de la compañía que compró en 2008, mientras que la primera, no. "Para nosotros 2009 fue un año doblemente atípico, no solamente por la recesión y la caída de los precios de los vehículos de ocasión, sino también por la integración con Universal Lease Iberia. Teniendo en cuenta estas circunstancias, 2009 ha sido un año razonablemente positivo", dice Bautista.
Con el Renting Cerrado, ING Car cobra una mensualidad fija que incluye servicios de mantenimiento, cambio de neumáticos, seguro a todo riesgo, gestión de multas y el pago del impuesto de vehículos de tracción mecánica siempre que los ayuntamientos no varíen su importe anual por encima del 25% del precio pactado en el contrato. "Es un producto fantástico porque el cliente sabe exactamente cuánto va a pagar por kilometraje", señala. La empresa está ofreciendo también una modalidad extrema, el Renting Económico, que traslada al arrendatario el control de la mayoría de gastos asociados al uso de los vehículos, como reparaciones o sustitución de neumáticos. Por ejemplo, a diferencia del renting clásico que permite el cambio ilimitado de neumáticos, el económico fija un máximo. Esto supone que dependerá del cliente que sus conductores no sobrepasen ese límite.
Lease Plan, por su parte, ha puesto a disposición de pymes y autónomos Cálculo Fácil, un producto que permite también el pago de una cuota fija; en tanto que para empresas grandes ofrece Cálculo Abierto, que reembolsa al cliente los ahorros conseguidos en la gestión de la flota. La firma cerró 2009 con una caída en sus ventas del 18%, hasta los 814,8 millones, al que según sus previsiones, este ejercicio le seguirá otro descenso del 5% debido a que persistirá la contracción del mercado de coches usados y la prórroga de contratos.
Por el contrario, Arval, que incrementó sus ingresos el 7,1%, hasta los 351,3 millones, vislumbra una recuperación a partir del último trimestre del año. "Si bien vemos con cierto temor que el fin de las ayudas del Plan 2000E y la subida del IVA a partir de julio pueda empañar este escenario, también es cierto que el efecto de esta subida se diluye en contrataciones a medio y largo plazo como las de nuestro sector", dice François-Xavier Castille, director general de Arval, que ha centrado su estrategia en coches ecológicos.
ALD Automotive, que el ejercicio pasado facturó 431 millones (no aportó la variación frente a 2008), ha introducido este año la cita previa para el cambio de neumáticos, que consiste en el cierre de un día concreto para el cambio de ruedas en el taller más cercano al cliente, donde además se le ofrecerá un trato preferencial. Asimismo, ha puesto en marcha el programa ALD Carmarket, un supermercado de coches de segunda mano, donde clientes de toda Europa pueden adquirir por internet vehículos de las existencias del grupo.
Alquiler de vehículos usados
Las firmas del sector están divididas en cuanto al alquiler de autos usados. "Cuando un contrato se cancela de forma anticipada y el coche vuelve a nosotros en óptimas condiciones, una forma de volverlo a sacar al mercado es el renting de coches usados, que está teniendo buena acogida", dice Pedro Malla, director general de ALD Automotive. Jorge Bautista, de ING Car Lease, destaca que esta modalidad equivale a una prórroga del contrato, pero cambiando de cliente. "Un coche que nos devuelvan con cuatro años de antigüedad y menos de 100.000 kilómetros está apto para rodar dos años más".Pero no todos están de acuerdo. "No lo hacemos porque no podemos garantizar el servicio óptimo", dice Ignacio Barbadillo, consejero delegado de Lease Plan. Opinión que comparte François-Xavier Castille, de Arval. "Estaríamos atentando contra la esencia misma del renting".
La cifra
14.000 coches con una antigüedad media de 42 meses incorporó a su flota ING Car Lease con la compra de Universal Lease Iberia.