El Estado coloca 5.000 millones de deuda pese a la tormenta griega
El Tesoro español se pone a prueba. El Estado ultima una emisión sindicada de bonos a 15 años de hasta 5.000 millones de euros y mañana está prevista una colocación de obligaciones a 30 años por valor de 500 millones de euros.
Las turbulencias financieras que se viven en los mercados estos días al calor de los problemas financieros de Grecia no impiden al Estado español acelerar sus emisiones de deuda. La semana se prevé intensa pues tras la colocación ayer de 6.577 millones de euros en letras a 12 y 18 meses ahora los esfuerzos se centrarán en emisiones a más largo plazo, en concreto a 15 y a 30 años.
El plato fuerte, la venta de bonos a 15 años, se realizará de forma sindicada y para ello el Tesoro ha contratado a HSBC, BBVA, Caylon Crédit Agricole, Santander y Société Générale como bancos colocadores de la emisión. Fuentes del mercado comentan que la operación oscilará entre los 3.000 y los 5.000 millones de euros aunque el importe final dependerá de los precios que exija el mercado y de la demanda, variables que aún no se han desvelado.
El Tesoro no quiso pronunciarse ayer sobre los objetivos de la emisión ni el calendario que se baraja aunque fuentes cercanas a la emisión comentan que el libro de solicitudes de demanda se abrió ayer y en principio se espera que la adjudicación se realice hoy, siempre y cuando las condiciones de mercado lo permitan.
A finales de diciembre del pasado ejercicio el Tesoro ya anunció su intención de emitir una obligación sindicada a 15 años en febrero, la segunda de su calendario para el primer trimestre, pues en enero completó una emisión a 10 años por un importe de 5.000 millones de euros. Una operación que se cerró al precio más alto del rango ofrecido entre 53 y 56 puntos básicos sobre el midswap -índice de referencia para las emisiones a tipo fijo-, lo que supuso una rentabilidad del 4,096%.
En las últimas semanas la mayor percepción de riesgo sobre España ha provocado que el diferencial entre el bono español a 10 años y el alemán al mismo plazo llegara a superar los 100 puntos básicos, aunque en las últimas sesiones se ha estrechado y ayer concluyó en el entorno de los 80,9 puntos básicos.
Este diferencial, no obstante, resulta superior al de principios de año y al del pasado mes de noviembre cuando el Tesoro realizó la última emisión de bonos a 15 años. Entonces colocó 3.645 millones de euros al 4,26% y por aquellas fechas el diferencial rondaba los 60 puntos básicos.
Los expertos no descartan que el Tesoro se vea obligado a ofrecer un precio atractivo para atraer compradores aunque ayer el impacto de la noticia en el mercado resultó esperanzador. "La noticia sobre la venta de bonos a 15 años no ha tenido impacto. El diferencial del bono a 15 años contra los swaps no se ha visto impactado y rondaba los 71 puntos básicos frente a los 71,5 de la víspera", explicaba ayer un operador del mercado.
El Tesoro tendrá que pedir prestados unos 200.000 millones de euros al mercado este año. Según anunció en su estrategia 2010 pedirá cerca de 104.000 millones a corto plazo, de los cuales 89.000 irán a pagar los vencimientos de letras entre 3 y 18 meses, al tiempo que necesitará otros 97.000 a medio y largo plazo.
"La vida media de la deuda del Tesoro ronda los 7 años. Emitir a 15 años hace que el riesgo de impago sea menor. Es lógico que el Tesoro esté alargando la duración de los vencimientos porque hay mucha concentración de emisión a un año y así se reduce vulnerabilidad", explican fuentes del mercado.
Unos bajos tipos de interés y el apetito de los inversores son otros motivos que explican la concentración de emisiones en la primera parte del año, según los expertos.
La rentabilidad de las letras sube al 0,897%
Continúa la demanda de deuda pública española. El Tesoro adjudicó ayer 6.577,87 millones de euros en letras a 12 y 18 meses, algo más de la mitad de los 10.614,98 millones de euros solicitados por los inversores. El Tesoro colocó 3.989,2 millones de euros en letras a 12 meses -de los 5.860 demandados- a un tipo del 0,897%, lo que supone un precio ligeramente superior a la rentabilidad del 0,858% ofrecida en la subasta anterior celebrada el pasado mes de enero. La reapertura de la subasta de letras a 18 meses también suscitó interés en el mercado. El Estado colocó 2.588,65 millones de euros de los 4.754,71 solicitados a un tipo marginal del 1,25%. El Tesoro no emitía letras a este plazo desde enero de 2007 y la última emisión se cerró a un tipo del 3,905%.Los objetivos del Tesoro pasaban por colocar entre los inversores un mínimo de 6.000 millones de euros y un máximo de 7.000 millones euros, lo que implica que el importe adjudicado finalmente se ajusta al rango previsto.