Empleo y competitividad en EE UU
La pérdida de 6,9 millones de empleos en EE UU en esta recesión, todo un récord de la posguerra, puede señalar problemas económicos a largo plazo. Aparte del impacto de la recesión global, el excepcionalmente débil mercado laboral es el reflejo del deterioro de la que una vez fue la poderosa América. Lo siguiente podría ser la reducción de la distancia entre salarios y nivel de vida en el resto de sitios.
La pérdida de 216.000 empleos no agrícolas en agosto no ha sido particularmente alarmante, aunque la tasa de desempleo alcanzase el 9,7%. Sin embargo, cuando se relaciona el dato con los del Institute of Supply Management y demás indicadores se comprueba que la tendencia del desempleo es significativamente más débil de lo que la situación económica normalmente aconsejaría. El robusto crecimiento del 6,9% en la productividad en el segundo trimestre refuerza la impresión de que en EE UU se están destruyendo más empleos de lo que justifica la recesión.
También lo hace una comparación histórica: en esta crisis se han perdido 6,9 millones de empleos, más de 2,1 que en cualquier otra recesión desde la II Guerra Mundial, mientras que la tasa de desempleo ha crecido en un 5,3%, un aumento récord de la posguerra.
Esto insinúa debilidad secular: el declive a largo plazo de la competitividad estadounidense. Una de las candidatas es la reducida ventaja en términos de disponibilidad y costes de capital. Los grandes déficits de EE UU y los grandes préstamos asociados, los cambios en la producción de riqueza con respecto a otros países y más factores han encarecido en las últimas décadas el capital en EE UU con respecto a economías con salarios más bajos.
Si la ventaja de capital de EE UU ha disminuido, eso tendría que implicar que la distancia entre los salarios tradicionalmente disfrutados en América y el de los mercados emergentes se reduciría en la medida en que sus economías alcanzan poco a poco a la estadounidense.
Como en alguna de las grandes mansiones de las de antes de la guerra, la economía de EE UU está mostrando capacidad de resistencia ante las fatales adversidades. Pero el impresionante edificio podría estar escondiendo señales de un deterioro que viene de lejos. Y uno de ellos es el efecto sobre los salarios de EE UU de 20 años de fugas de capital.
Martin Hutchinson