Los hogares necesitan 6,8 años de su renta para comprar una casa
La rebaja de los tipos de interés, en mínimos históricos, y el abaratamiento de los pisos ha permitido que en menos de un año el porcentaje de renta que destinan los hogares a la compra de su casa disminuya del 42,6% al 31%. Aun así, a las familias su casa todavía les cuesta el dinero equivalente a 6,8 años completos de todos sus ingresos.
En apenas nueve meses las familias han visto cómo el nivel de esfuerzo que deben realizar para adquirir una vivienda, o lo que los expertos también denominan la accesibilidad, ha retornado a niveles no vistos desde mediados de 2006, cuando España vivía sumida en la vorágine del boom inmobiliario.
Comparando el precio medio de una vivienda con la renta bruta disponible de los hogares, las últimas cifras publicadas por el Banco de España calculan que en la actualidad los hogares necesitan 6,8 años de renta para comprar casa, cuando a mediados de 2008 esa ratio alcanzaba los 7,7 años, casi el máximo de la serie, que se marcó en 2007 con un promedio de 7,8 años. Pese a dicha reducción, esta cifra permanece aún muy lejos de los 3,6 años de renta que se necesitaban en 1996 para comprar un piso.
Sobreendeudamiento
El Banco de España recomienda no destinar más de un tercio de los ingresos
Medido mes a mes, y teniendo en cuenta las deducciones fiscales por compra de vivienda, el porcentaje de ingresos que destina hoy una familia media a la adquisición de un piso es del 31%, nivel muy próximo a los mínimos de la serie histórica, que se marcaron en 1999, cuando el grado de esfuerzo apenas representaba un 20% de la renta mensual de los hogares.
Esta cifra del 31% está en sintonía con lo que recomienda el Banco de España a las familias y a las entidades financieras a la hora de conceder préstamos hipotecarios. La institución que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez considera que los hogares no deben destinar más de un tercio de sus ingresos al pago de su hipoteca para evitar situaciones de sobreendeudamiento.
La disminución de los niveles de esfuerzo, hasta valores muy similares a los registrados en 2006 y 2005, podría facilitar la reactivación de determinados segmentos de demanda de vivienda, con el consiguiente aumento del número de transacciones a lo largo de la segunda mitad de este año y muy especialmente a partir del próximo ejercicio, según destaca la Asociación Hipotecaria Española (AHE). No obstante, en opinión de todas las fuentes consultadas, la completa reactivación del mercado inmobiliario será un proceso gradual que se producirá en consonancia con la recuperación de la economía nacional en su conjunto.
"El progresivo ajuste de los precios de los inmuebles contribuirá a que siga mejorando la accesibilidad, así como el mantenimiento de los tipos en los niveles actuales (en el 1%). Pero lo más importante es que el mercado laboral comience a evolucionar de manera favorable", aseguran en una de las principales tasadoras del país.
"Si las familias empiezan a comprobar que los bancos vuelven a prestar dinero con normalidad y el horizonte laboral se despeja, paulatinamente asistiremos a una recuperación en las ventas de casas, ya que la crisis lo que ha hecho es dejar congelada una demanda de vivienda que ahora prefiere posponer su decisión de compra", afirman en una asociación de promotores. Gran parte de los expertos consultados prevén la estabilización del sector a finales de 2011 o 2012.
En junio se vendieron 35.372 pisos
El mercado de vivienda permanece sumido en la apatía. El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó ayer las cifras sobre transacciones inmobiliarias en junio y los números no arrojan grandes cambios. Durante ese periodo se contabilizaron apenas 35.372 compras de pisos, lo que significa un 25,5% menos que en idéntico mes de 2008, pero también un levísimo incremento del 4% sobre las 34.012 casas que se vendieron en mayo.En cualquier caso, la serie histórica, que se remonta hasta comienzos de 2007, muestra que esas 35.000 operaciones se encuentran aún muy lejos de los niveles alcanzados en pleno boom inmobiliario, cuando en un mes podían llegar a venderse más de 80.000 viviendas. De hecho, en lo que va de año, la caída de la actividad acumula ya una contracción del 34,9%.El 90% de las viviendas transmitidas mediante compraventa en junio fue de renta libre, mientras el 10% restante correspondió a pisos con algún grado de protección pública (VPO). En términos interanuales, el número de viviendas libres vendidas descendió un 26,1%, mientras las protegidas lo hicieron un 20,1%.Los datos publicados por Estadística muestran como las viviendas de nueva construcción siguen concentrando más operaciones que las usadas, con un 53,5% de las compraventas. Esta circunstancia, de mantenerse en el tiempo, contribuirá a absorber con mayor rapidez el ingente stock de inmuebles sin vender que existe en la actualidad y que algunas fuentes cifran en un millón de viviendas. De hecho, los expertos coinciden en señalar que hasta que no se venda buena parte de ese excedente, el mercado no podrá normalizarse y recuperar los volúmenes de actividad que den respuesta a la demanda estructural y eviten seguir con la actual destrucción de empleo. Por regiones, el 58% de las operaciones se concentró en Andalucía, Valencia, Madrid y Cataluña.