Zapatero negocia con ERC y CiU las fechas de su rendición de cuentas
La llamada geometría variable a la que tan aficionado era José Luis Rodríguez Zapatero en el Congreso, dejará de jugar hoy un papel estelar después del acuerdo alcanzado con Esquerra Republicana sobre el nuevo modelo de financiación autonómica. El PSOE negoció ayer con ERC y CiU las fechas en las que comparecerá el presidente para explicar la evolución de la crisis económica.
ERC y los nacionalistas catalanes vuelven a tener la llave para que Zapatero comparezca o no en pleno antes de agosto puesto que el PP e IU harán 'pinza' en esta ocasión para forzar la presencia del presidente en el Congreso. El propio Zapatero contrajo este compromiso con Izquierda Unida hace mes y medio, pero ha intentado pactar con CiU y ERC el retraso de esta comparecencia hasta finales de agosto o el mes de septiembre para no someterse de nuevo al desgaste de un pleno parlamentario en el que todos los grupos de la oposición, sin excepción, criticarán la gestión que está haciendo el Gobierno de la crisis económica.
De todas formas, según fuentes socialistas, el acuerdo sobre la nueva financiación autonómica alcanzado con las comunidades gobernadas por el PSOE y los integrantes del tripartito catalán, deja margen a Zapatero para comparecer antes de las vacaciones, incluso en el supuesto de que el diálogo social que mantienen a tres bandas Gobierno, empresarios y sindicatos no llegara a buen puerto antes de agosto.
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, es uno de los protagonistas de la negociación que más se están implicando en la misma para conseguir un acuerdo lo antes posible. También se ha involucrado en ella el jefe de Gabinete del presidente del Gobierno, José Enrique Serrano, y el responsable de la Oficina Económica de La Moncloa, Javier Vallés.
Para Zapatero, explican fuentes parlamentarias, es importante estrenar el nuevo curso político con este asunto cerrado, para que no se solape con la negociación presupuestaria.
La oposición exigirá el desfile de seis ministros
Ya es un clásico el intento de la oposición de fiscalizar al Gobierno en verano, fuera del periodo ordinario de sesiones, a través de la llamada Diputación Permanente, que es una especie de pleno parlamentario en pequeño. En la de este miércoles, el Partido Popular no sólo exigirá la comparecencia de Zapatero. Pedirá también la del vicepresidente de Política Territorial, Manuel Chaves, y la de los ministros de Interior, Industria, Ciencia e Innovación, Educación y Defensa. El principal partido de la oposición intentará también llevar de nuevo al Congreso al ex director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Alberto Saiz.En el caso de Manuel Chaves, el PP le quiere pedir cuentas sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, del que piensan descolgarse las cinco comunidades gobernadas por este partido, al menos en su primera fase, la que corresponde a la votación que se celebrará esta tarde en el Consejo de Política y Fiscal.