La CE investiga el pacto de una farmacéutica con fabricantes de genéricos
La Comisión Europea abrió ayer una investigación sobre los presuntos acuerdos ilegales entre una farmacéutica francesa y varios fabricantes de genéricos para retrasar la salida al mercado de las versiones más baratas de algunos medicamentos.
La apertura del expediente es la primera y tímida consecuencia de la investigación sectorial sobre el mercado farmacéutico llevada a cabo por la CE durante los pasados 18 meses. La comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, presentó ayer los resultados definitivos de ese ingente esfuerzo, que le ha llevado a concluir que "el mercado no funciona de manera adecuada".
Kroes aseguró que han comprobado que en 17 países de la UE la versión genérica de algunos medicamentos cuya patente expiró entre 2000 y 2007 tardó siete meses en llegar al mercado. Bruselas atribuye ese "retraso" a posibles acuerdos en la resolución de litigios entre las llamadas farmacéuticas innovadoras y los fabricantes de genéricos. Por su culpa, el consumidor tarda más en tener acceso a los genéricos, que suelen ser un 20% más baratos (el ahorro se dobla dos años después de su llegada al mercado).
A pesar del hallazgo, Kroes sólo ha abierto un expediente contra la farmacéutica francesa Servier y los fabricantes de genéricos Krka, Lupin, Matrix, Niche y Teva. La comisaria atribuyó su aparente timidez a la necesidad de concentrar sus limitados recursos humanos en los casos más urgentes.
Más bien parece que Kroes tiene muy pocas posibilidades de corregir el resto de imperfecciones del mercado farmacéutico. Ayer apuntó como posibles soluciones la creación de una patente europea, de un sistema unificado de litigios en el sector y más celeridad en los procedimientos de reembolso de medicamentos. Todas esas carencia se conocían antes de la investigación. Y su corrección escapa a a las competencias de Kroes.