La Fed consideró a mediados de septiembre la necesidad de bajar los tipos de interés
La Reserva Federal consideró a mediados de septiembre la necesidad de bajar los tipos de interés si empeoraba la turbulencia en los mercados financieros, según las actas de la reunión divulgadas hoy.
En su reunión del 16 de septiembre, el Comité del Mercado Abierto de la Reserva, que decide la política monetaria en Estados Unidos, mantuvo en el 2% el tipo de interés de referencia, el nivel en que ha estado desde abril. El Comité votó en esa ocasión unánimemente por el mantenimiento de la política monetaria, ante el temor que suscitaba la mayor inflación.
No obstante, el presidente de la Reserva, Ben Bernanke, sugirió hoy que el empeoramiento de las condiciones económicas y financieras hará necesario un ajuste de esa política.
La Reserva también anunció hoy que adquirirá pagarés privados para facilitar la liquidez en la operación de las empresas privadas. La medida, sin precedentes, no impresionó demasiado a los mercados, y los valores cayeron en Wall Street. Los mercados financieros siguen presionando para que la Reserva Federal baje aún más el tipo de interés, que hace un año estaba en el 5,25% y ahora se encuentra en el 2%.
Los operadores en futuros dan hoy un 25% de probabilidades de una rebaja de tres cuartos de punto porcentual en el tipo de interés de referencia antes de la reunión del 28 y 29 de octubre. Las probabilidades de una rebaja de al menos medio punto se mantienen en el 100%.
Las actas de la reunión del 16 de septiembre indican que algunos de los gobernadores del sistema de la Reserva Federal expresaron su preocupación por que la inflación no se atenue en meses venideros y que pueda acelerarse si la economía de EE UU se reactiva el año próximo.
En los últimos años, los bajas tipos de interés contribuyeron, en parte, al otorgamiento fácil de préstamos que alimentaron las hipotecas de alto riesgo, el consumo y el endeudamiento excesivos que desembocaron en la actual crisis financiera. Asimismo, las actas muestran que los expertos de la Reserva se mostraban a mediados de septiembre poco optimistas acerca del crecimiento económico en 2009.