Repsol, bajo el influjo del cambio de accionistas
El anuncio de que Sacyr ha puesto en venta su participación del 20% de la petrolera da un vuelco al interés del mercado sobre el grupo ante la entrada de un nuevo socio
El reconocimiento por parte de Sacyr de que la venta de su participación en Repsol está en su agenda ha impulsado un valor que marcaba mínimos desde enero de 2005. La petrolera subió el viernes un 5,6% con lo que reduce su pérdida anual al 17,39%. Hasta ahora la idea de que Sacyr podía desprenderse de su 20% había castigado la cotización, señalan los expertos, pero los actuales objetivos de la constructora reavivan el sentimiento de que las operaciones corporativas no concluyen con la opa de Gas Natural a Fenosa.
'Todavía quedan muchas incógnitas pero lo que actualmente se impone es que Sacyr va vender su 20% en bloque y que no va a ir soltando acciones en el mercado', señala Luis Rose, de Inverseguros. Afirma que si además Caixa Catalunya y otros socios se unen a la operación se trataría de la venta de aproximadamente un 25% o, lo que es lo mismo, de un paquete de control.
Pero subraya que, antes de emitir un juicio sobre el impacto de estos posibles cambios en Repsol, es necesario conocer qué compañías están interesadas en entrar en su capital. El analista de Inverseguros añade que 'La Caixa, como accionista del grupo, y el Gobierno tendrán mucho que decir sobre la operación'.
Y si el comprador del 20% es un fondo u otro inversor financiero, el impacto es igualmente significativo, ya que Repsol perdería el blindaje que de hecho tiene con la suma de los paquetes de Sacyr, La Caixa y otros socios españoles. Otra sensación que predomina en el mercado es que los grandes del sector en Europa: Total, Shell o BP, así como conglomerados de otras partes del mundo, están interesados en poner un pie en el grupo español.
Este movimiento se produce cuando Repsol intenta, a través de la OPV sobre un 20% de YPF, reducir riesgo y ganar atractivo. Pese a que la operación se presenta compleja en el actual entorno bursátil, en principio se mantiene el objetivo de que la colocación se materialice este año. No obstante, el calendario final quedará establecido en función de la evolución de los mercados.
Trabajan en la oferta de YPF los bancos BNP Paribas (coordinador general), UBS, Credit Suisse, Goldman Sachs, Raymon James y Santander. Aunque puedan fijarse descuentos, sobre la mesa sigue la valoración que de YPF se hizo cuando el grupo empresarial argentino que dirige Enrique Eskenazi compró a principios de año un 14,99% del capital: 15.000 millones de dólares (10.638 millones de euros).
La transacción es importante por varios aspectos, pero más ahora en una etapa compleja en Bolsa en la que es preciso enviar mensajes positivos a los inversores. 'La OPV de YPF sería un catalizador para el valor', señala Rafael Rico, de Fortis. Pero opina que no va a ser tan fácil. 'Puede tener dificultades ya que la situación actual de los mercados no juega a favor de la transacción', añade.
Menos riesgo
También Sandra Boente, de Santander, estima que esa operación puede ser un impulso para las acciones. Y los analistas de UBS, en un informe que titulan La vida después de Argentina, ponen de manifiesto que Repsol, aun excluyendo lo que aporta YPF, permanecerá en América Latina como un jugador relevante. Desde Cazenove se destaca, asimismo, los aspectos positivos de la OPV. æpermil;stos son básicamente la reducción del riesgo de Argentina -país que vuelve a presentar un preocupante deterioro de su economía y cuyas reservas de hidrocarburos están en declive- y la posibilidad de invertir en otras áreas geográficas, mejorando el perfil de su cartera de activos de exploración y producción de petróleo y gas.
La creencia de que a Repsol le conviene recortar peso en YPF y, por tanto, en el país andino, ha sido defendida por los expertos desde hace años. Y por los mercados, que han premiado con avances cada vez que la compañía daba algún paso en esa dirección. Desde UBS se manifiesta que tras la OPV se materializará una remodelación del negocio del grupo, mientras que otros analistas subrayan que posibilitará la ejecución de algunas de las metas contenidas en el plan estratégico.
Pero hay otros factores, como la fuerte corrección del precio del crudo, que empujan a la baja al grupo, al igual que lo hace con otras petroleras. Total retrocede un 19,58% en 2008; Shell, un 22,78% y BP baja un 17,07%.
El barril de petróleo Brent ha descendido más de un 33% desde el récord de 146 dólares alcanzado el pasado 3 de julio, y las cotizaciones de las empresas del sector le acompañan en el desplome. No obstante, no fue así cuando el crudo estaba en la cumbre. Detrás de este comportamiento divergente están el aumento de los riesgos geopolíticos, la subida de los costes de extracción, así como la elevación de los impuestos a las petroleras extranjeras por parte de los países productores.
Impacto de la opa de Gas Natural
Para unos es una oportunidad, pero otras entidades creen que la opa de la gasista a la eléctrica le supone a Repsol, aunque sólo sea el primer paso, el desembolso de una cifra cuantiosa, unos 1.000 millones de euros. Y que se trata de una oferta -a 18,33 euros por título-, que conlleva una fuerte prima del 65% respecto la cotización de Fenosa del 15 de julio. El atractivo vendría por la posibilidad de reforzar su posición como suministrador de gas a través de los activos que ésta tiene en el Mediterráneo.
Brasil no cotiza en acción
Hay otros temas que pueden impactar positivamente en el valor, según los analistas, y que ahora no parece que sean tenidos en cuenta por los inversores. El más citado es el previsible éxito de los proyectos de exploración de Brasil. Para UBS, esos activos pueden cambiar el perfil del grupo. En esta misma línea, Rafael Rico, de Fortis, añade que 'Brasil no está ahora recogido en la cotización', aunque matiza que las noticias positivas relacionadas con ese campo pueden tardar uno o dos años.El yacimiento Carioca, en el que Repsol tiene una participación del 25%, puede albergar según los cálculos iniciales unos 33.000 millones de barriles. La parte que corresponde a la empresa española es similar a la totalidad de sus actuales reservas.Con este conjunto de fortalezas y debilidades y después de la fuerte trayectoria a la baja de los últimos meses, la mayoría de los bancos de negocio y sociedades de Bolsa recomienda adquirir acciones. Ese es el consejo del 48,57% de los analistas consultados por Bloomberg, mientras que el 31,43% se decanta por mantener y el 20% restante aconseja vender. Entre los que prefieren comprar están Deutsche Bank, Goldman Sachs y Banesto Bolsa. UBS está, asimismo, en ese grupo, pero ha bajado el precio objetivo de 30 a 22,50 euros por título, al tiempo que señalan que es más cara que otras petroleras integradas europeas. Desde Fortis se señala que recomiendan comprar pero con un objetivo de medio plazo. Por su parte, HSBC y Daiwa están neutrales con el valor. ING y Standard & Poor's optan por mantener el valor.