La confianza del consumidor en Reino Unido sufre la mayor caída desde 2004
La confianza del consumidor en el Reino Unido bajó en julio a 51 puntos, un 18% menos que en junio y un 46% menos que en el mismo mes de 2007, lo que supone la mayor caída porcentual desde que comenzó a elaborarse este índice en mayo de 2004, informaron hoy las responsables del estudio, Nationwide y TNS.
El índice de confianza cayó once puntos respecto a junio, hecho que la economista jefe de Nationwide, Fionnuala Earley, atribuyó al reciente anuncio de datos económicos negativos que incrementan la probabilidad de que el país entre finalmente en recesión.
Según el estudio, un 61% de los británicos (9 puntos porcentuales más que el mes anterior) considera que la actual situación económica es "mala", mientras que un 85% cree que no mejorará en los próximos seis meses. Asimismo, un 42% cree que habrá pocos empleos disponibles dentro de medio año, frente al 34% que tenía esa opinión en junio.
La mayoría de británicos (el 61%) mantiene su idea de que aún es mal momento para comprar grandes bienes como casas y automóviles, aunque en lo que se refiere a artículos del hogar la opinión está más dividida: un 25% considera que es buen momento y un 21%, que no.
Pese a los recientes datos macroeconómicos, que han colocado a la economía británica en una situación de crecimiento cero y previsiblemente camino de la recesión, Nationwide afirma que sigue siendo improbable que el Banco de Inglaterra baje los tipos de interés este verano.
El banco central, que mañana hará públicos los tipos de interés tras su reunión mensual, se ha decantado en los últimos meses por mantener estable el precio del dinero -llevó a cabo una bajada total de 0,75 puntos porcentuales entre diciembre y abril- para combatir el alza de la inflación, que en julio alcanzó el 4,4%.
Sin embargo, nuevos datos conocidos después de que se realizara el indicador del mes de julio (entre el 23 de junio y el 20 de julio), podrían llevar al Banco de Inglaterra a modificar su política, tal y como se le reclama desde varios sectores económicos.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) anunció ayer que, aunque el PIB del Reino Unido puede crecer un 1,2% este año, la economía británica podría entrar en recesión en el segundo semestre, con bajadas del 0,3 y 0,4% anual en el tercer y cuarto trimestres, respectivamente.