Lo que las empresas no saben sobre las fugas de empleados
Contratan a psicólogos, realizan informes, diseñan políticas, se devanan los sesos... y llegan a conclusiones érroneas. La mayoría de las empresas están convencidas de que las fugas de algunos de sus empleados hacia otras compañías se deben a una serie de razones que no tienen nada que ver con los motivos reales por los que los profesionales deciden cambiar de trabajo.
Así, según un estudio de la consultora Watson Wyatt denominado Sistemas estratégicos de recompensa en el ámbito europeo, las razones fundamentales señaladas por los empleados para cambiar de compañía son, en primer lugar, el tipo de trabajo, seguido de la seguridad del puesto y del salario base. Por el contrario, las empresas consideran las oportunidades de desarrollo de una carrera profesional, el prestigio de la empresa y la cuantía del salario base como las principales razones que atraen a nuevos empleados.
En cuanto a la permanencia en la compañía, sigue existiendo discordancia entre las percepciones del empleador y las de los trabajadores. Para impedir que sus empleados dejen su trabajo, las empresas hacen hincapié, en primer lugar, en las oportunidades de desarrollo de una carrera profesional, las oportunidades de ascenso y el salario base. Por su parte, los trabajadores citan como principales causas para dejar la empresa los crecientes niveles de estrés, la poca competitividad de los salarios y la falta de oportunidades de ascenso.
'Las empresas parecen estar poniendo mucho más énfasis en la planificación de la carrera profesional a largo plazo que los propios empleados', señala Begoña Benito, socia directora general de Watson Wyatt, quien asegura que las prioridades de muchos empleados son mucho más prosaicas y que es conveniente recordarlas: el tipo de trabajo, el salario, el estrés y el trayecto desde su casa al trabajo.