Los gestores recelan de las perspectivas económicas, según Merrill

Los mercados pueden estar en zona de máximos pero las expectativas que manejan los gestores de fondos resultan mucho menos optimistas que a comienzos de verano. El último recorte de tipos de interés aprobado por la Reserva Federal ha sido el revulsivo para el rebote pero sin lograr restaurar la confianza del mercado en la economía y los beneficios empresariales. Al menos eso se desprende de la encuesta mensual de Merrill Lynch a gestores de fondos.

El porcentaje neto de encuestados que considera que el crecimiento económico global se deteriorará ha alcanzado el 55% frente al 5% que mantenía esta visión en julio o el 48% de septiembre. Los inversores también anticipan un escenario de desaceleración de beneficios y el 44% prevé una caída frente al 12% que opinaba así en julio. Una serie de circunstancias que han provocado un importante cambio en las estrategias de inversión, ahora más proclives a favorecer los sectores con un perfil de crecimiento antes que de valor; se reducen los plazos de inversión y la exposición al riesgo es menor. Sin embargo, de momento, tan sólo se identifican a tres áreas con fuertes perspectivas de crecimiento. En concreto la tecnología, los materiales y la industria.

El apetito por el riesgo ha aumentado pero los niveles de liquidez, sin embargo, todavía están en el 4% frente al 3,4% de julio. Las expectativas a favor de un incremento de inflación también han aumentado, lo que ha empeorado las perspectivas del mercado de renta fija.

Tan sólo un 4% de los encuestados opina que la Bolsa esta infravalorada, frente al 23% que opinaba lo mismo hace un mes.

Emergentes

Los emergentes gustan. El 51% neto de los encuestados piensa que estos mercados cuentan con las mejores perspectivas de beneficios. A su vez consideran que serán los regiones menos afectadas por una desaceleración económica global.