El Santander ultima la venta de Unión Fenosa a inversores gallegos
El SCH negociaba anoche 'en términos finales' la venta del 22% de Fenosa, tras la oferta presentada por un consorcio gallego integrado por Amancio Ortega, dueño de Inditex; Jacinto Rey, presidente de Constructora San José, y Caixanova. También pujaba un segundo grupo con la familia Del Pino y Fadesa, entre otros.
El Banco Santander ultimaba anoche la venta de su participación del 22,02% en el capital de Unión Fenosa a un grupo de inversores gallegos encabezados por Amancio Ortega, propietario del imperio Inditex. Con Ortega se han aliado Jacinto Rey, presidente de constructora San José y Caixanova, que tiene ya un 4% de la eléctrica. Según fuentes cercanas a la operación, estos inversores habrían ofrecido 30 euros por acción (ayer la cotización cerró a 25,70 euros) lo que supondría unos ingresos para el banco de 2.000 millones de euros y unas plusvalías de 1.047 millones, pues el banco tiene la participación con un valor en libros de 953 millones. Los 30 euros era el límite que el banco se habría marcado para la desinversión, según las mismas fuentes.
Además de estos inversores, otro segundo grupo integrado por la familia Del Pino y la inmobiliaria gallega Fadesa, entre otros, habría materializado también su interés en la operación. Tanto en Inditex, como en Ferrovial, constructora controlada por Del Pino, dijeron desconocer estos movimientos, lo que hacía indicar que se trataría de una inversión individual. Por su parte, fuentes del mercado señalaron a última hora que la venta estaba 'en términos finales'.
En paralelo, Caixa Galicia, que negó estar en la operación, anunció ayer la compra de otro 1% de Unión Fenosa (el viernes adquirió otro paquete idéntico) lo que la refuerza como segundo accionista de la compañía que preside Antonio Basagoiti con un 10%.
Caixanova, San José, y Amancio Ortega han presentado una oferta conjunta
Fuentes del sector consultadas consideran que el banco 'ha planteado en realidad una subasta con su paquete de Fenosa'. Por otro lado, aunque a Botín le interesaría más cerrar la venta el próximo ejercicio, 'ha querido aprovechar el coste de oportunidad que proporcionaría a Unión Fenosa un hipotético éxito de la opa de Gas Natural sobre Endesa', señalan las mismas fuentes.
Esta oportunidad se deriva de la intención del Gobierno de reforzar a Unión Fenosa como tercer operador del mercado, tal como han expresado fuentes cercanas al Ejecutivo, permitiéndole adquirir activos de Endesa, en el caso de que la oferta de Gas Natural llegue a buen puerto.
Nuevos escenarios
Sin embargo, los inversores españoles no serían los únicos protagonistas de esta operación, en cuyo escenario también participa la portuguesa Galp Energía, holding dueño de Petrogal y Gas de Portugal (GDP). De hecho, el pasado fin de semana, responsables del grupo luso mantuvieron una reunión en Madrid con el principal accionista de Fenosa.
Pese al interés de la compañía portuguesa, cuya intención sería complementar el negocio de gas de su filial GDP con el eléctrico de Fenosa, en la compañía eléctrica española no están dispuestos a caer 'en manos portuguesas', aunque sí verían con muy buenos ojos 'una fusión de igual a igual', según los deseos expresados por sus gestores.
Para llegar a esta operación el banco, cuya intención de vender Unión Fenosa viene de lejos, habría ideado un plan: buscar un inversor o un grupo de inversores financieros españoles dispuestos a desempeñar el mismo papel que ha estado jugando la entidad financiera, pero con voluntad de continuidad y que estén dispuestos, en una segunda fase, a plantear una fusión posterior con la filial gasística de Galp Energía.
Esta supondría la creación de la primera compañía energética hispano portuguesa que 'daría credibilidad al mercado ibérico de la electricidad y del gas' y para Portugal sería una manera de resarcirse de la prohibición de Bruselas de proceder a una fusión entre EDP y GDP. Otro elemento que facilitaría las cosas es la participación en Galp de la petrolera Eni, con la que Fenosa participa en su negocio de gas en Egipto. De llegarse a producir la alianza hispano-portuguesa, la operación sí requeriría la autorización de Bruselas.
Un día de vaivenes vertiginosos en la cotización
El protagonista más activo del día. Los rumores de oferta de compra dispararon ayer de forma espectacular la cotización de Unión Fenosa, que hasta bien avanzada la sesión llegó a acumular una revalorización del 7,9% respecto a su cierre del miércoles. El globo se deshinchó conforme avanzó la tarde. Las acciones llegaron a caer el 3,4% y concluyeron con un retroceso del 1,98%.Como suele suceder en Bolsa, el movimiento a la baja fue mucho más vertiginoso que al alza. Los títulos Unión Fenosa tardaron casi seis horas en lograr una subida ligeramente superior a los dos euros. Esa ganancia se esfumó, sin embargo, en apenas hora y media. Si a las cuatro de la tarde, Unión Fenosa cotiza cerca del precio máximo histórico de 28,3 euros, al cierre de la sesión, los títulos marcaron 25,7 euros.