El mueble evoluciona hacia formas más cálidas
El mueble de vanguardia se humaniza. Más color y más calor. En definitiva, formas menos agresivas que buscan romper la frialdad que durante muchas temporadas han marcado la tendencia del llamado mueble de diseño, si bien hoy en día cualquier empresa que se precie, aunque fabrique mobiliario de líneas clásicas, tiene en su nómina a diseñadores que aporte su matiz diferencial en un sector que, como ocurre en otros, no se libra de las copias.
Como ocurre cada final de septiembre, las principales marcas de mueble moderno se agrupan en la Selección Internacional de Diseño de Equipamiento para el Hábitat (Sidi), salón incluido en la Feria Internacional del Mueble de Valencia, la cita más importante del sector en España.
Aunque aún se mantienen los diseños en los que las lineas rectas, el aluminio y el cristal son las características fundamentales, en las novedades que se van incorporando a los stands de las empresas aparecen cada vez más líneas más redondeadas, mayor presencia de la madera -que recupera los tonos más claros, frente al negro de años anteriores- y el color.
El tapizado de sillas y sofás es uno de los aspectos que más calidez está aportando a los nuevos muebles. Destaca la presencia de diseños inspirados en los sesenta y los setenta, así como la mezcla de colores que dan vida a los salones, frente a los colores básicos -blancos y negros fundamentalmente- que se encontraban en colecciones anteriores. Incluso se va más allá, como demuestra la apuesta de la empresa Paco Capdell por tapizar su conocido modelo de sillas Lady, realizadas por Vicente Soto, con dibujos del diseñador madrileño Oscar Mariné.
Y al margen del mobiliario, destacan algunos complementos que ayudan a ese viaje al confort. Las alfombras de la colección Roses, de Nani Marquina, que aportan un tacto especial, o la lámpara de pie Adorable, de la firma B Lux, que recupera la tradicional pantalla circular, son algunas de las propuestas que evocan un hogar más cercano a las personas.
Amueblar 30 metros cuadrados.
Cuando Vicent Martínez, de Punt Mobles, vio el proyecto de micropiso realizado y presentado por Jorge Cortés, Sergio García-Gasco y Borja García en Construmat se le ocurrió de inmediato la idea. Vestir aquel pequeño apartamento para que dejase de ser una idea y se convirtiese en una realidad.Punt Mobles, en colaboración con otras empresas como Tau Cerámica, han montado un prototipo de esta vivienda en la Feria del Mueble de Valencia. 'Lo más importante es que no hemos hecho ni muebles a propósito ni hemos cambiado el diseño del piso para adaptarlos', explica Borja García.Los muebles, por tanto, son los que se pueden comprar de serie y se integran en la vivienda con naturalidad, desapareciendo en armarios cuando no se utilizan, lo que permite 'que la casa sea un salón de 30 metros cuadrados o un comedor de 30 metros cuadrados o un dormitorio de esas dimensiones, dependiendo de las necesidades', explica Martínez. Lo cierto es que, tal y como está planteada la solución, el micropiso no resulta especialmente agobiante.