Tecnología punta para preservar la sierra de Madrid
La tecnología y el medio ambiente se dan la mano. La Sierra del Rincón, la Comunidad de Madrid, Hewlett-Packard (HP) y la empresa estadounidense de software Deneb han puesto en marcha un programa piloto a través del cual la tecnología punta de movilidad es utilizada como herramienta para mejorar la explotación de los montes en tiempo real, perfeccionar la producción de miel y virtualizar las rutas turísticas.
El programa se ha puesto en marcha en La Hiruela, una pequeña población de menos de 20 habitantes, escondida entre bosques y montañas, a 100 kilómetros de Madrid. El proyecto está enmarcado en la iniciativa de la Comunidad de Madrid que promueve que la Sierra del Rincón sea declarada reserva de la biosfera por la Unesco.
La gestora de la idea fue Elena de Mingo, responsable de desarrollo local y medioambiental de la zona. Para materializarla, HP ha donado seis ordenadores de bolsillo iPAQ, y Deneb ha desarrollado el sistema de software. Ahora será posible llevar a cabo un mejor control medioambiental y realizar un mayor aprovechamiento de los recursos turísticos.
'Son proyectos que parten de un concepto avanzado: el del servicio de calidad medioambiental. Es decir, que pretenden agregarle valor, potenciar el medio ambiente', explicó Mingo.
Luis del Olmo, director general de Promoción y Disciplina Ambiental de la Comunidad de Madrid, señaló que 'una reserva de la biosfera tiene que ser más que un espacio bien conservado; debe tener capacidad para un desarrollo económico y de sus poblaciones compatible con el medio ambiente'.
El proyecto de ordenación territorial permite no sólo localizar fácilmente cada parcela, con la ayuda del GPS, sino también marcar ejemplares y lugares de especial interés, además de disponer de fotografías aéreas que facilitan el seguimiento de la evolución de los bosques. Permite también una mejor explotación forestal, al demarcar con exactitud áreas con árboles susceptibles de ser talados.
Con la ayuda de una iPAQ, los técnicos y agentes forestales pueden simplificar y automatizar todas sus tareas, agregándole mayor eficiencia a su trabajo, ahorrando tiempo y almacenando datos precisos. Estos profesionales también pueden consultar día a día en sus ordenadores las rutas a seguir, seleccionando un área de trabajo trazada sobre una ortofoto (documento cartográfico con características métricas) del lugar. Además, a partir de una serie de menús desplegables, pueden anotar todas las tareas de la jornada, controlar la flora y fauna, apuntar las incidencias surgidas, medir distancias y hacer nuevas observaciones, que conforman mapas temáticos exhaustivos.
En el caso de la gestión apícola, los datos, fotografías y GPS recogen información que permite, luego, estudiar y analizar el estado de las poblaciones de abejas y la idoneidad de los emplazamientos de las colmenas. Y de esta manera se promueve la producción de alimentos de calidad protegiendo el medio ambiente, y se camina hacia la diversificación de las actividades económicas de la zona. Así, es posible optimizar los recursos: el usuario puede saber los recorridos más idóneos y los puntos de floración más cercanos, para que su explotación tenga un mayor rendimiento.
El tercer proyecto, el referido a la virtualización de las rutas turísticas, forma parte de una nueva apuesta de la sierra: potenciar el turismo. Los guías disponen de estos dispositivos electrónicos que incorporan a las rutas amplia información sobre las especies que avistan y de los espacios protegidos que atraviesan.