La Justicia europea estudia desde hoy si suspende las sanciones impuestas a Microsoft
Microsoft afirma estar preparada para cumplir las sanciones impuestas por prácticas monopolísticas. Pero la compañía ha pedido que no se ejecuten hasta que haya una sentencia firme sobre su recurso, en un proceso que podría durar más de tres años. El Tribunal de Primera Instancia de la UE analiza desde hoy si concede la suspensión.
El Tribunal de Primera Instancia de la Unión Europea celebra desde hoy una audiencia en la que se escuchará la petición de Microsoft para que se suspendan las sanciones impuestas por la Comisión Europea por abuso de posición dominante. La decisión formal se conocerá, probablemente, en "varias semanas", según han indicado fuentes comunitarias.
Tras una amplia investigación de más de cinco años y tres pliegos de cargos, el pasado 24 de marzo Bruselas concluyó que Microsoft había abusado de su poder de mercado restringiendo deliberadamente la interoperabilidad entre los ordenadores con 'Windows' y los servidores de grupos de trabajo de sus competidores, y vinculando su 'Media Player' (WMP), un producto en el que había competencia, al propio 'Windows'.
La Comisión Europea también le impuso la obligación de revelar a los competidores antes del 27 de julio la información necesaria para que sus productos sean
compatibles con 'Windows', además de una sanción económica de 497 millones de euros, la más alta de la historia del organismo regulador europeo.
Dos recursos
Desde que se conoció la decisión de Bruselas, Microsoft presentó dos recursos ante la justicia europea; el primero, para pedir la anulación del fallo de la Comisión; el segundo, solicitando la suspensión de las modificaciones hasta que el asunto fuera debatido a fondo. Será este segundo recurso el que centre la audiencia que empieza hoy, en la que los jueces verán desfilar no sólo a los abogados de Microsoft y la Comisión, sino también a una decena de terceras partes que han pedido intervenir en el proceso.
La compañía de Bill Gates pide en ese recurso que las sanciones del Ejecutivo comunitario no se apliquen hasta que se resuelva aquel con una sentencia firme del Tribunal, algo que podría tardar en llegar más de tres años. Bruselas considera que para entonces estas medidas ya no tendrán ningún efecto, pero el Ejecutivo comunitario dio una tregua al gigante informático hasta que el Tribunal se pronuncie sobre la suspensión preliminar. Mientras tanto, Microsoft ya ha pagado la multa de 497 millones de euros impuesta por la institución europea.
Microsoft, lista para cumplir las sanciones
El responsable de asuntos jurídicos del gigante informático, Brad Smith, indicó esta semana que Microsoft acatará las modificaciones impuestas por la Comisión Europea si el Tribunal de Luxemburgo los confirma. "Evidentemente pensamos que someternos (a las exigencias de la Comisión) provocará grandes daños, no solamente a nuestra compañía. Sin embargo, si nos obligan a doblegarnos, estaríamos en disposición de hacerlo", añadió.
"Hemos invertido muchísimo tiempo y energía, y gastado millones de dólares en el transcurso de los últimos meses, por lo que estaríamos en disposición de respetar lo que el Tribunal nos mande", sea cual sea su decisión", comentó Smith.
Por su parte, la Comisión Europea se ha negado esta semana a comentar la posibilidad de volver a sentarse a negociar con Microsoft. "Especular sobre hipotéticos escenarios es algo que nunca hacemos", apuntó Amelia Torres, portavoz de Competencia en el Ejecutivo comunitario.