El petróleo y los tipos lastran la Bolsa
El precio del petróleo continuó ayer su escalada tanto en el mercado de Londres, donde superó los 37 dólares por barril (alcanzó 37,2 dólares), como en el estadounidense, en el que llegó a rozar los 40.
El precio del petróleo continuó ayer su escalada tanto en el mercado de Londres, donde superó los 37 dólares por barril (alcanzó 37,2 dólares), como en el estadounidense, en el que llegó a rozar los 40. Estas son las cotizaciones más elevadas desde 1990 y, de mantenerse en el tiempo, supondrán una amenaza para la incipiente recuperación económica mundial.
El fuerte clima de inseguridad que impera en las principales instalaciones petrolíferas de Oriente Próximo y las informaciones que apuntan a un inminente desabastecimiento del mercado de gasolina de EE UU son algunos de los factores que están llevando los precios del crudo a niveles desconocidos desde la primera Guerra del Golfo.
No obstante, los analistas consultados se muestran convencidos de que esta coyuntura de elevados precios energéticos tenderá a estabilizarse después del verano, 'ya que no es un problema estructural de índole económica, sino que está más relacionado con factores geopolíticos', aseguró Andrés Vázquez, de Safei.
Los expertos no se ponen de acuerdo sobre cómo tienen que actuar los bancos centrales. Frente a quienes creen que las subidas de tipos deben esperar, otros apuestan por acelerarlas para evitar los repuntes en el IPC
El Gobierno español aún no ha calculado los efectos sobre el PIB que tendrá el elevado coste del petróleo, que desde enero se ha mantenido por encima de 30 dólares, precio establecido en los presupuestos
Este experto recuerda que además del petróleo, otras dos variables son claves: la cotización del dólar y la duración del escenario actual. 'Con un billete verde en los niveles actuales, la factura energética puede amortiguarse sensiblemente, pero si la divisa estadounidense recupera fuelle, el quebranto sobre las economías europeas será mayor', añade. Félix González, de Beta Capital, pone como ejemplo que 'es peor un petróleo a 33 dólares muchos meses que otro a 37 hasta después del verano'.
Por otro lado, algunos expertos sostienen que teniendo en cuenta que en algunos países, como Alemania y Francia, la demanda interna aún da muestras de extrema debilidad, el mayor problema de un petróleo caro lo tendrán también las empresas.
Dado ese escaso vigor del consumo, las compañías no tienen apenas margen para trasladar el aumento de sus costes a los precios de sus productos. Así, la opinión generalizada es que un petróleo caro es un obstáculo al crecimiento y por tanto preocupa más los efectos que puede tener sobre la actividad en su conjunto que sobre los precios y la inflación.
Además de las razones políticas, vinculadas a la situación de Oriente Próximo y de EE UU, Pedro Mirete, de Ahorro Corporación, explica que los anuncios de recortes de la producción efectuados por la OPEP han dañado la cotización del crudo.
'Y no olvidemos la presión que ejerce el aumento de la demanda de países como China e India, que hace tan sólo unos años no contaban en la clasificación de principales consumidores, y ahora se han convertido en economías intensivas en la utilización de energía'. En opinión de este analista, la OPEP se verá abocada a anunciar un aumento de la producción (algo que por otra parte ya hace, puesto que los límites se están superando a diario) y lo normal es que tras el verano el petróleo se modere.
Sobre los riesgos que esta alta cotización puede tener sobre crecimiento e inflación, Mirete asegura que la situación macroeconómica actual no es la misma que en anteriores escaladas del crudo. 'Ahora hay una menor dependencia energética general y en precios existe margen para una subida puntual de la inflación', explica.
En España, desde el Ministerio de Economía y Hacienda confían en que los precios se moderen a corto plazo. Teniendo en cuenta que el escenario macroeconómico de este año se elaboró con un precio del petróleo hasta de 30 dólares, y que en lo que llevamos de ejercicio ha estado prácticamente todo el tiempo por encima de ese nivel, será difícil cumplir con esa estimación para el crudo. Aun así, Economía aún no ha calculado en cuánto puede reducir el crecimiento del PIB previsto, del 3%, si se mantuvieran estos precios hasta diciembre.
Por último, en lo que no se ponen de acuerdo los analistas es en cómo deben actuar los bancos centrales. Mientras unos apuestan por retrasar las subidas de tipos para no perjudicar la actividad, otros recomiendan aumentar las tasas ya para prevenir repuntes inflacionistas.
¿Por qué sube el crudo?
1La reducción de producción anunciada y ratificada por la OPEP en marzo, que afectará a un millón de barriles diarios, hasta situar el techo en 23,5 millones de barriles diarios. Sin embargo, los datos de producción de la primera quincena de abril han mostrado que el acuerdo aún no se ha aplicado, en parte por el exceso de capacidad existente entre sus miembros, sobre todo Arabia Saudí.2Fuerte demanda mundial. El notable crecimiento del PIB en China y Estados Unidos es una de las causas del tirón del precio. La AIE revisa sistemáticamente al alza la demanda mundial de crudo, y ahora la sitúa en 80,7 millones de barriles diarios, frente a la estimación de 79 millones de hace sólo seis meses. La demanda mundial de petróleo crecerá un 2%, y la de China un 8,9%.3Riesgo geopolítico y caída de stocks. La reducción de los stocks ha desatado una oleada de compras en Estados Unidos y otros países de la OCDE por temor a desabastecimiento futuro a consecuencia del terrorismo internacional. Esta inquietud se ve además reforzada por la inestabilidad geopolítica en varios puntos, desde Irak, en guerra desde hace un año, a Venezuela o Nigeria.