Los europeos reclaman mayor protección de datos
La Comisión Europea ha publicado un informe sobre la directiva de protección de datos en el que denuncia el retraso en la aplicación de la directiva y las diferencias entre las leyes de los Quince, que perjudican la libre circulación de datos entre los Estados miembros.
Esta directiva, que tiene como objetivo la protección de los datos personales de los consumidores y la libre circulación entre los diferentes países de la Unión, se ha ido incluyendo en la legislación interna de los Quince con mucha lentitud, a pesar de que fue aprobada hace más de cinco años. El documento presentado por la Comisión fue realizado tras la consulta a 10.000 sujetos, entre los que se encuentran Gobiernos, instituciones, asociaciones profesionales y de consumidores, empresas y ciudadanos.
Según este documento, la mayoría de los ciudadanos europeos -un 81%- piensa que la sensibilización sobre la protección de datos es insuficiente y un 44% piensa que el nivel de protección es mínimo. Por otro lado, el 69,1% de las personas que trabajan con datos personales considera 'necesario' que se cumplan ciertas normas a la hora de trabajar con ellos. La Comisión inició en 1999 un proceso de infracción contra Alemania, Luxemburgo, Países Bajos, Irlanda y Francia en el Tribunal de Justicia de la UE por no haber incluido la directiva en su legislación. De estos países, Francia es el único que aún no la ha adoptado, e Irlanda, si bien lo hizo, aún no lo ha notificado a Bruselas.
Las dificultades para la aplicación de esta directiva provienen de las diferencias entre las leyes de protección de datos de los países de la UE y del hecho de que en Italia y Grecia no existen este tipo de leyes. Según el Ejecutivo comunitario, la libre circulación de datos es necesaria para el desarrollo de una gran parte de las actividades económicas y beneficiará, por ejemplo, al intercambio de información entre países sobre investigaciones científicas, salarios de los trabajadores y derechos de pensión acumulados en otros Estados de la Unión.
El informe de la Comisión confirma que las diferencias entre la legislación de los Estados aún persisten en algunos casos, debido a que la directiva no ha sido aplicada correctamente. Otras veces, la razón reside en que la norma comunitaria deja un margen a cada Estado para trasponerla y los Gobiernos nacionales optan por diferentes caminos para redactar la ley.
El Ejecutivo comunitario elaboró este documento para saber si los objetivos de la directiva se habían cumplido y prevé redactar un segundo informe para el año 2005 en el que se identifiquen las posibles modificaciones de la directiva.
Según Bruselas, el principal objetivo de la norma, que es la eliminación de obstáculos a la libre circulación de datos, se ha cumplido, pero aún es necesario reducir las diferencias entre las normativas de los países europeos. Este segundo informe se elaborará a partir de conversaciones con los Estados miembros y un grupo de trabajo de la Comisión.