El presidente de Seat adelanta que las ventas cayeron un 6% en 2002
El presidente de Seat, Andreas Schleef, adelantó hoy que la marca española obtuvo bemeficios en 2002, pese a que sus ventas bajaron un 6% en comparación con el año anterior.
En una entrevista con el diario "Die Welt" publicada hoy, Schleef indicó que el pasado año la filial del grupo Volkswagen vendió unos 460.000 vehículos, un 6% menos que el año anterior y que el volumen de negocios retrocedió en menor cuantía. Para 2003, Schleef opinó que en vista de la incierta situación económica, los pronósticos más allá de tres a seis meses son difíciles, pero confió en que mejore la situación en la segunda mitad del año y que la facturación se mantenga, al menos, al nivel del año anterior, "salvo que sucedan cosas extraordinarias".
Entre otras razones, justificó la caída de las ventas de Seat con que el nuevo Ibiza no alcanzó la plena capacidad de producción hasta mediados de 2002, pero precisó que la marca no ha evolucionado mucho peor que el conjunto del mercado y que en el caso de Alemania, aumentó sus entregas en un 5%.
Schleef apuntó que aún no se ha tomado ninguna decisión sobre la producción en serie del "roadster" Tango, que "se ajustaría perfectamente a la imagen de nuestra marca" y que podría estar en el mercado en 2005, mientras que la realización del proyecto del deportivo dos puertas Salsa, un año más tarde, no parece tan probable.
Sobre el futuro de la cooperación de Seat con Audi, señaló que el desarrollo de los motores dependerá en el futuro más de la marca de Ingolstadt, mientras que Seat se ocupará de desarrollar algunas carrocerías para Audi. Precisó que, no obstante, la comercialización se mantendrá separada y no será necesario fusionar la red de concesionarios de ambas marcas.
Schleef comentó que la reducción de los precios en una media del 5% en Alemania obedece a la estrategia de Seat de recortar las diferencias de precios dentro de la Unión Europea a menos del 10 %, lo que ha logrado el grupo.