_
_
_
_
'Telecos'

El nuevo móvil no será rentable para las operadoras europeas hasta 2014

La telefonía móvil de tercera generación no levanta cabeza. Mientras los operadores y fabricantes de equipos se afanan por lanzar nuevos servicios de datos y poner en el mercado terminales más o menos experimentales, los informes de los analistas se muestran cada vez más pesimistas y cuestionan la viabilidad a medio plazo de la tecnología UMTS.

Si hace menos de tres semanas fue la Comisión Europea la que alertó sobre la dificultad de rentabilizar el nuevo móvil, ahora ha sido la firma de análisis Forrester Research. Los números rojos no abandonarán los negocios de UMTS de las operadoras hasta el año 2014 como promedio, asegura el informe de Forrester, una cifra que queda a medio camino entre los escenarios optimista y pesimista que contemplaba el documento comunitario.

El retraso en la implantación del UMTS y las nuevas previsiones de demanda, muy ajustadas a la baja, son los responsables de los nuevos horizontes de rentabilidad, y se aplican de manera conjunta para todas las operadoras con licencia en Europa. Otra variable, el precio de las licencias, afecta de forma distinta a cada país. Así, las operadoras de Alemania y el Reino Unido, las naciones que más recaudaron por las concesiones de UMTS, no verán números negros en sus cuentas del nuevo móvil hasta 2015.

En el lado contrario están Francia, Italia y Finlandia, con precios más ajustados en la venta de los permisos y mejores previsiones de demanda. En estos países, la tecnología de tercera generación podría ser rentable dentro de ocho años, en 2010.

Estas cifras contrastan con la actitud de los operadores. El 89% de las compañías que cuenta con una licencia de UMTS es totalmente optimista con respecto a la tercera generación de móviles, según reseña Forrester. La razón de estas divergencias está en las previsiones de demanda de los nuevos servicios, muy alejadas entre las compañías y los expertos. 'Las operadoras están soñando', concluyen los analistas de Forrester, que cifran en el 10% el número de clientes actuales de móvil en Europa que van a utilizar UMTS en 2007, lo que supone exactamente una quinta parte de las previsiones que manejan las telefónicas y que constituyen la base de su optimismo.

Las expectativas alentadoras que muestran públicamente las empresas de telefonía móvil contrastan también con su propia actitud de repliegue de posiciones y retraso del lanzamiento del UMTS.

El informe de Forrester se une a toda una corriente crítica que en las últimas semanas ha cuestionado tanto la viabilidad del UMTS como el comportamiento de la Unión Europea en todo el proceso.

Si la subasta de licencias fue un error, más lo está siendo la obligación de explotar las frecuencias concedidas con una tecnología única y común, aseguran estos informes, puesto que los problemas en su desarrollo están retrasando el lanzamiento. Asia o Estados Unidos, por ejemplo, no tienen estas trabas, y así lo demuestra su supremacía en la tercera generación. Si Europa fue el líder indiscutible de la segunda generación celular, con el GSM, Asia y Estados Unidos le han tomado ya la delantera en el nuevo móvil multimedia.

Más información

Archivado En

_
_