Un juez elige a un ex presidente de la SEC para fiscalizar a Worldcom
El juez Jed Rakoff eligió a Breeden entre tres candidatos propuestos por la SEC y la propia operadora telefónica. æpermil;ste es un paso habitual en el procedimiento cuando el denunciante es el regulador de los mercados y no se trata de poner a la empresa bajo vigilancia, sino, como el propio Breeden describió ayer, 'significa ser los ojos y oídos del juzgado dentro de la empresa'. 'No voy a reemplazar a los gestores', aseguraba ayer quien fuera presiente de la SEC entre 1989 y 1993, el primer mandato presidencial de George Bush, padre del actual presidente de EE UU.
El mandato del juez a Breedman, que actualmente es presidente de la consultora Richard C. Breeden & Co., especializada en crisis empresariales, tiene como misión especial que se prevengan pagos de salarios excesivos, un problema que ya se ha dado con Kmart y Enron cuando su cuerpo directivo se renovó tras sus suspensiones de pagos. El salario de Breedman será de 800 dólares (811 euros) a la hora.
Este nombramiento se produce poco después de que el supervisor del Estado de Nueva York, Carl McCall, haya empezado a dar los pasos necesarios para denunciar también a la telefónica que la semana pasada reveló una artimaña contable por valor de 3.895 millones de dólares, que ha inflado sus resultados en los últimos cinco trimestres, cuando debería haber reportado pérdidas.
Auditoría interna
Worldcom ya ha avisado que está revisando sus cuentas desde 1999. Los trucos contables de la empresa y su consiguiente caída bursátil han hecho perder al fondo de pensiones de este Estado unos 300 millones de dólares.
El martes, John Sidgmore, el presidente de la empresa que sustituye desde mayo a Bernard Ebbers, dijo ante la prensa que Worldcom ha actuado con celeridad. Sus declaraciones contrastan con lo publicado ayer por The Wall Street Journal, que señalaba que la auditora interna que descubrió las artimañas contables, Cynthia Cooper, se ha convertido en testigo del Departamento de Justicia, que estudia si querellarse contra le empresa. Según el periódico estadounidense, los informes de Cynthia Cooper se hicieron por una investigación a iniciativa propia y no rutinaria, como alega Worldcom, y sus avisos fueron desdeñados inicialmente.