El mercado ignora los riesgos que afronta la china MG
La automovilística sufre los aranceles, la competencia doméstica y unos márgenes bajos

Los inversores podrían tener que frenar su entusiasmo por SAIC, dueño de MG. El fabricante chino de automóviles, respaldado por el Estado y valorado en 24.000 millones de euros, presenta una cotización muy atractiva. Pero afronta varios problemas.
La firma, propietaria desde hace casi dos décadas de la antigua MG, con sede en Reino Unido, lleva tiempo en declive. Su acción ha caído a la mitad desde su máximo en 2018, cuando las ventas de vehículos superaron los 7 millones; fueron 4 millones en 2024. Aunque las entregas han crecido un 18% en lo que va de año, los analistas siguen esperando que los ingresos anuales sean un 25% inferiores a los de 2018, según Visible Alpha.
Pese a ello, la acción, que cotiza en Shanghái, sigue valiendo 16 veces las ganancias previstas, según Visible Alpha. Está muy por encima de las 11 de Geely y las 10 de Great Wall Motor, pese a que se espera que los márgenes netos de estas sean más del doble del mísero 1,9% previsto para SAIC este año, según LSEG.
En China, afronta una guerra de precios y que la competencia está dedicando muchos más recursos al diseño de una nueva generación de eléctricos inteligentes. El presupuesto de I+D de SAIC equivalía solo al 2,8% de los ingresos en 2024, es decir, unos 2.200 millones de euros. BYD, que vende un número similar de vehículos, gastó casi el 7%.
SAIC quiere triplicar sus exportaciones, hasta 1,5 millones en 2027. Si lo logra, eso debería impulsar los beneficios, ya que el negocio en el extranjero suele ser más rentable, según HSBC. Pero esos esfuerzos se ven dificultados por los aranceles: México quiere subirlos al 50% en general, y en la UE SAIC sufre un 45,3%, el más alto de todas las marcas chinas.
SAIC ha encontrado soluciones, como aumentar las ventas de híbridos enchufables en la UE. Pero sus exportaciones globales ya estaban bajo presión antes de que la mayoría de los aranceles entraran en vigor, y cayeron un 15% en 2024, según S&P. Relocalizar la producción, una solución a largo plazo, es un trabajo lento. Aún no se ha construido la planta prevista en Europa. Y planea vender parte de su 49% en su empresa conjunta de India.
Quizás la prima de SAIC refleje en parte su condición de empresa respaldada por el Estado. También cuenta con un socio extranjero inusualmente fuerte en China, Volkswagen. Pero los inversores están ignorando varias señales de alerta.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías

