El final de Powell en la Fed: un consenso que se desmorona
El motivo de una posible bajada de tipos es que los dos efectos negativos de los aranceles están justo en equilibrio

Donald Trump podría lograr una bajada de los tipos. En Jackson Hole, Jerome Powell se mostró abierto a flexibilizar la política monetaria de la Fed en septiembre. Es un breve momento de acuerdo entre el banco central, la Casa Blanca y los eufóricos mercados. Pero el motivo es que los dos efectos negativos de la guerra comercial están momentáneamente en equilibrio.
En medio de amenazas de investigaciones penales y despidos, así como de ataques a los datos económicos, la injerencia presidencial en la agencia es cada vez mayor. Se avecinan más enfrentamientos a medida que se hace más evidente la cruda realidad de una economía en desaceleración. El discurso de Powell expuso numerosas razones para la incertidumbre, la mayoría derivadas de la política fiscal y comercial de la Administración.
Señaló que, con la entrada en vigor de los aranceles a un ritmo desigual y prolongado, la presión al alza sobre la inflación podría prolongarse durante un tiempo, a medida que las empresas luchan por adaptarse. La pesadilla sería que esto llevara a los trabajadores a exigir aumentos salariales, lo que desencadenaría una espiral de precios y salarios.
Por ahora, esa preocupación se ve compensada por el temor a que el mercado laboral se haya debilitado de forma constante, lo que crearía una “situación difícil” para el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), encargado de fijar la política monetaria. Dado este “curioso equilibrio”, Powell asintió con cautela a una bajada de tipos en septiembre. Los inversores reaccionaron con alegría.
Powell afirmó que dependerá de los datos: “Nunca nos desviaremos de ese enfoque”. Esa frase podría pasar desapercibida en un año normal, pero dado que se trata de su última visita a Jackson Hole como presidente, tiene un peso adicional. La capacidad de la Fed para fijar la política monetaria sin interferencias está siendo atacada: justo antes del discurso, un hombre fue escoltado fuera de la sala por agentes del sheriff por abuchear a la gobernadora Lisa Cook: Trump amenazó con despedirla mientras Powell estaba en el estrado. El republicano también ha despedido al director de la Oficina de Estadísticas Laborales.
La influencia de la Casa Blanca no hará más que crecer. Trump ha nombrado al leal Stephen Miran para cubrir una vacante reciente en la Fed. Por primera vez en más de 30 años, dos miembros del FOMC (ambos nombrados por Trump en su primer mandato) votaron en contra de la decisión de mantener los tipos estables este verano. Los aspirantes a dirigir el banco podrían adoptar una línea igualmente moderada.
La pregunta es qué pasará si las condiciones económicas empiezan a cambiar drásticamente en su contra. El enfoque de Powell suele ser suave, pero su advertencia es clara.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías

