Las nuevas víctimas de la normalización monetaria, y la apuesta de Barceló por la paz
Las subidas de tipos afectan ahora al sector inmobiliario
Era inevitable que la normalización monetaria se llevara algunas víctimas financieras por el camino. Primero fueron las SPAC y la mayoría de los criptoactivos, expresiones más evidentes de la burbuja inversora; luego les tocó el turno a algunos bancos, como Silicon Valley Bank, que sufrieron la depreciación de su cartera de renta fija soberana; en paralelo, Credit Suisse llegó al fin del camino de su catastrófica serie de errores. Y ahora se están viendo por fin los efectos en el mercado inmobiliario, y de forma indirecta en los bancos que han prestado a los fondos especializados estadounidenses, muy castigados por la pérdida de valor de las oficinas debido al teletrabajo. Dentro de Europa, también hay problemas en países como Suecia, Alemania o Austria, aunque no son tan intensos.
Ferrovial: quién dijo que hacer las Américas sería fácil
Es de esperar que, si esta tendencia a la reducción de las oficinas se mantiene, los inmuebles acaben reconvirtiéndose, sea en comercios, sea en viviendas; esto último rebajaría la presión de los precios residenciales en los centros urbanos. En EE UU, al menos.
Ferrovial está en plena gira de presentación de la empresa a los inversores estadounidenses, de cara a su cotización en la Bolsa de Nueva York, el objetivo final de su polémico traslado de sede a Países Bajos. Se trata de entrar en la Bolsa más líquida del mundo, que además está en uno de los países donde más actividad tiene la compañía.
Pero nadie dijo que hacer las Américas fuera fácil: la acción cayó ayer por la tarde más de un 3%, coincidiendo con el anuncio de sus planes de dividendos: 1.700 millones de euros hasta 2026. El valor, con todo, acumula un 25% de subida desde octubre.
Barceló apuesta fuerte al turismo de Omán y a que reine la paz en Oriente Próximo
Omán es uno de los países más estables de Oriente Próximo, y rara vez es noticia, aunque tampoco se libra del todo de conflictos como el actual del mar Rojo, en paralelo a la guerra de Israel y Gaza. En concreto, hace tres semanas Irán se apoderó de un petrolero de EE UU en el golfo de Omán. Pero es de prever que sea un acontecimiento puntual, y que unos y otros países encontrarán la manera de acabar con una contienda que perjudica a todos. La hotelera Barceló, desde luego, apuesta por el futuro de Omán, en particular el negocio turístico, que el país quiere multiplicar por cuatro de aquí a 2040. Los destinos del desierto no son tan llamativos como las históricas ciudades europeas o el Mediterráneo, pero, a cambio, y precisamente por eso, están poco masificados.
La frase del día
“El laborismo está a favor de las empresas y el nivel actual del impuesto de sociedades, el 25%, el más bajo del G7, logra el equilibrio correcto. Si queremos que las empresas inviertan en Reino Unido, los impuestos no pueden subir y bajar como un yo-yo según cada capricho político”
Rachel Reeves, portavoz de economía de los laboristas británicos
Las IA (como las personas) son más inteligentes cuanto menos aspiran a serlo
Alphabet anunció el jueves que ha diseñado una herramienta de generación de imágenes a partir de texto, llamada ImageFX. Por supuesto, le pone la etiqueta de inteligencia artificial, cosa que también ha sido siempre el buscador Google, aunque de forma menos aparatosa.
Mientras, ChatGPT y otras máquinas hablantes y escribientes siguen cometiendo errores de bulto, al menos en sus versiones para el gran público. El hecho es que las IA son más eficaces cuanto menos arriesgan, cuanto más escuchan al usuario y menos intentan tener una voz propia. Por ejemplo, DeepL, de traducción, ofrece resultados de una calidad mareante. Los robots inteligentes, irónicamente, son más inteligentes cuando menos aspiran a serlo. Como las personas.
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