_
_
_
_

La hora de la inversión en pequeñas cotizadas

Este tipo de firmas ha logrado un rendimiento medio anual de casi un 8% en los últimos 22 años

Pequeños diamantes.
Pequeños diamantes.Agencia Getty (Getty Images/iStockphoto)
Miguel Moreno Mendieta

Tesla, Amazon, Banco Santander, BP, Netflix... las grandes compañías cotizadas son las que más atraen los titulares y el interés de los inversores. No en vano, ganan decenas, incluso centenares, de miles de millones cada año y emplean a miles de personas. Sin embargo, bajo el radar de las grandes firmas de análisis sobrevuelan una miríada de compañías cotizadas de pequeña y mediana capitalización, con negocios robustos en ciertos nichos de mercado. Para muchos expertos, el momento actual es un punto de entrada muy atractivo para posicionarse en este tipo de empresas.

Las cifras a largo plazo indican de hecho que invertir en empresas al margen de los gigantes puede ser una buena oportunidad. El índice Russell 2000 monitoriza la evolución de esos dos millares de compañías norteamericanas de pequeña capitalización, con un tamaño mediano de 1.000 millones de dólares. Su revalorización media anual ha sido del 7,88% desde comienzos de siglo. En ese mismo periodo, el S&P 500 (que reúne a los JP Morgan, Amazon, Mastercard, Coca Cola y demás gigantes de EE UU) ha rentado un 7,28%. Parece que David se codea o incluso puede con Goliath.

Francisco Rodríguez d’Achille, responsable de la gestora Lonvia Capital en España, considera que “estamos ante una ventana de oportunidad única para invertir en cotizadas europeas de pequeño y mediano tamaño, siempre que se tenga un horizonte temporal de entre tres y cinco años”.

¿Qué explica ese mejor comportamiento de las pequeñas frente a las grandes? Para Rodríguez d’Achille, la principal causa es que estas firmas “son menos analizadas por el mercado”. Además, ese menor tamaño acaba siendo una ventaja “porque suelen tener mayor capacidad para crecer, ya sea expandiéndose a otros países o absorbiendo a competidores”. Además, “desde una perspectiva del rendimiento ajustado al riesgo, las pequeñas compañías son más atractivas, ya que son mucho menos sensibles al ciclo y pueden ejecutar su estrategia industrial sin depender de factores exógenos sobre los cuales no se tiene ningún tipo de control”.

Lonvia Capital, True Value y Magallanes tienen vehículos especializados en este activo”

Muchas veces, los gestores y los distribuidores de fondos tienen más dificultad a la hora de explicar la cartera a sus clientes. Cuando un vehículo tiene en cartera a Visa, Microsoft y a LVMH, al particular no hay mucho que explicarle. Son grandes compañías, dueñas de marcas archiconocidas y con presencia global. ¿Por qué preocuparse?

Pero si el fondo invierte en una pequeña compañía inmobiliaria de residencias de ancianos en Bélgica, hay que explicar mejor la tesis a los inversores. Ese es el caso de Aedifica, una de las posiciones del nuevo fondo Finaccess Compromiso Social Europa. Alfonso de Gregorio, asesor del vehículo, explica que esta firma, con una capitalización de poco más de 3.110 millones de euros “tiene activos por valor de 5.600 millones, con presencia en 8 países europeos, y un balance muy saneado”.

En Finaccess Value decidieron entrar en esta compañía tras ver cómo se desplomó su valor en 2022. “El año pasado fue de locos. Hubo un momento en que se vendían compañías de forma indiscriminada, algunas como Aedifica, con unos datos fundamentales muy sólidos”, apunta De Gregorio. Esta empresa cotizaba entre 2019 y 2021 a un precio de entre 18 y 20 veces beneficio, mientras que ahora está en siete veces. “Era una oportunidad única para entrar”.

En el caso de las compañías pequeñas europeas, la evolución en el largo plazo ha sido mucho mejor que en las grandes. El índice MSCI Europe Small Caps se ha revalorizado un 7,7% de media anual en los últimos 22 ejercicios (¡más que el S&P 500!), mientras que el índice general europeo, el Stoxx 600, ha rentado solo un 4,7%.

La oportunidad de invertir en este segmento de mercado, en Europa, puede ser especialmente atractiva. Primero porque la Bolsa del Viejo Continente sigue cotizando con unas valoraciones más baratas que las de Estados Unidos. Y segundo, porque las small caps (como se conoce en la jerga financiera a estas firmas) también presentan métricas más baratas que las grandes.


Una brecha que se va cerrando

La división de análisis global del banco suizo UBS emitió esta semana un informe en el que apunta a que esta oportunidad única para invertir en pequeñas cotizadas empezaba a cerrarse. “Hace unos meses, las ‘small caps’ europeas ofrecían niveles de valoración muy atractivos que se han ido moderando, pero la brecha frente a las grandes sigue siendo interesante”, apuntan. Las revalorización de las pequeñas cotizadas europeas en 2023 ha sido del 8,4% frente al 10,7% del Euro stoxx 50, que reúne a los 50 titanes del Viejo Continente. El Ibex Small Caps avanza en 2023 el 19% frente a casi el 13% del Ibex 35.

Uno de los movimiento que recomiendan desde UBS es ir virando desde las firmas que tienen un perfil más cíclico, y que el año pasado lo hicieron mejor, hacia empresas de sectores como el tecnológico, que han estado muy castigadas y que ahora podrían recuperar parte del terreno perdido.

Uno de los fondos españoles con más tirón en este ámbito es True Value Small Caps, gestionado por Alejando Estebaranz. La volatilidad de este vehículo no es apta para cardíacos. En 2021 rentó un 45%, y el año siguiente cayó un 33,5%. Con todo, desde su arranque a mediados de 2020 puede presumir de un retorno medio anual de casi un 19%. El fondo tiene un patrimonio de 72 millones de euros.

Otro referente en España es Lola Solana, gestora del fondo Santander Small Caps. Este vehículo ha logrado una rentabilidad media anual del 7,8% en la última década, batiendo por goleada al Ibex 35. Eso sí, si se mira el retorno en cinco años, el fondo se ha quedado casi plano.

Una de las limitaciones de este tipo de vehículos es que nunca pueden crecer mucho. Los grandes vehículos de inversión de EE UU llegan a tener un tamaño de más de 100.000 millones de dólares. Con esa dimensión, destinar un 1% de la cartera supondría adquirir entera una compañía de 1.000 millones de dólares. Pero los gestores de fondos nunca se sienten cómodos teniendo una participación mayoritaria en una empresa. Por eso, los grandes fondos no pueden comprar pequeñas empresas. Y los fondos de small & mid caps nunca pueden crecer mucho. El Magallanes Microcaps, uno de los fondos españoles de referencia en este ámbito, tuvo que cerrar el vehículo a nuevos partícipes, tras alcanzar un patrimonio de 100 millones de euros.Una de las vías para poder ser más grandes es tener un universo de inversión más amplio. Eso es lo que hace Estebaranz, que invierte, además de en Europa, en Estados Unidos, Canadá, Australia y China. Una de sus principales posiciones es el promotor inmobiliario chino Kaisa Prosperity.

Borja Soldevila es analista y gestor de carteras en EDM, y se encarga del fondo EDM Pointer que “ha logrado más de un 90% de rentabilidad agregada desde su lanzamiento, hace casi tres años, a pesar de un entorno macroeconómico y geopolítico muy complicado”. A su juicio, la oportunidad de invertir en pequeñas y medianas compañías sigue siendo muy atractiva. “Tras las caídas del año pasado, podríamos estar ante el inicio de un nuevo ciclo alcista, cuando las pequeñas suelen hacerlo mejor. Y, en el caso de Europa, vemos que las valoraciones siguen siendo muy bajas respecto a otros mercados”.

No solo para fondos nicho

El atractivo de las compañías de pequeño tamaño está llamando la atención de gestores más allá de los especializados en esta tipología. La nueva gestora creada por el equipo directivo de Bestinver, Panza Capital, está mirando con mucho interés la evolución de algunas compañías europeas de este tamaño. Beltrán de la Lastra, consejero delegado de la firma, explica que “el encarecimiento del precio del gas afectó a muchas compañías industriales alemanas, en algunos casos de forma excesiva”. El gestor explica el caso de Covestro, que mantiene unos fundamentales muy sólidos pero cotiza a la mitad de su precio máximo.

“También tenemos en cartera una joya como Arjo, un fabricante de camas hospitalarias que capitaliza 10.000 millones de euros”, apunta De la Lastra. “La empresa ha perdido un dos tercios de su valor en Bolsa desde el pico del Covid, a pesar de seguir siendo un empresón”, asegura.

Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, Twitter y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días

Sobre la firma

Miguel Moreno Mendieta
(Madrid, 1979) es licenciado en Derecho y Economía por la Universidad Carlos III. También cursó el Máster de Periodismo de El País. Se incorporó al periódico Cinco Días en 2006, tras pasar por la web de El País y Mi cartera de Inversión. Escribe sobre el sector financiero, con un foco especial en fondos de inversión y los seguros.

Archivado En

_
_