Juan Barriobero (DWS): “Novo Nordisk, Astrazeneca y ASML son de las pocas europeas con liderazgo global y cotizan aún a precios razonables”
El gestor español lleva las riendas de uno de los fondos de inversión más emblemáticos de la firma alemana
Juan Barriobero de la Pisa (Valencia, 1970) lleva media vida dedicada a los mercados financieros. Tras acabar la carrera de Economía y el servicio militar, en 1994, probó suerte en Fráncfort. Allí empezó a trabajar en una filial de Barclays, cuando aún no existía el euro y la ciudad alemana no era todavía una de las capitales financieras del continente. Su carrera le llevó después a Londres, a Madrid, a trabajar para la filial de inversiones de La Caixa, hasta recalar en DWS, la gestora vinculada a Deutsche Bank, en 1999. La mayor parte del tiempo ha tenido su puesto de trabajo en España, pero en 2020 volvió a Fráncfort, para hacerse cargo de uno de los fondos de inversión más emblemáticos de la firma alemana: el DWS Invest European Equity High Conviction. Un vehículo que concentra las mejores ideas de Bolsa europea de la firma. Barriovero gestiona directamente alrededor de 100 millones de euros y forma un tándem con su jefe con el que administran activos por valor de casi 2.000 millones de euros.
Pregunta. ¿Cómo ha sido volver a Fráncfort tantos años después?
Respuesta. Muy emocionante. Ahora es una época totalmente distinta de mi vida. De trabajar allí recién graduado, a mudarme con toda mi familia justo después de la pandemia. La ciudad es estupenda y trabajar para una firma tan potente como DWS es un orgullo.
P. ¿Qué características tiene el principal fondo que gestiona?
R. Se trata de un fondo de alta convicción, en el que me centro en una cartera relativamente reducida de acciones. Si lo habitual es que haya 100 en los fondos de Bolsa, aquí no pasamos de 30 ó 40 valores. Es una forma de desmarcarnos de los índices de referencia y aportar más valor al partícipe.
P. Siempre que acierten...
R. Eso es. Ahora, por ejemplo, nos hemos descolgado ligeramente. Hicimos una rotación de activos tratando de anticipar las bajadas de tipos, que han sido algo más lentas de lo que esperábamos. Pero no nos preocupa porque tenemos muy buenas compañías en cartera. Con todo, en el último año el fondo ha subido un 15,7%.
P. ¿Cómo fue la rotación de la que habla?
R. Incorporamos compañías vinculadas al sector inmobiliario, y compañías eléctricas. Se trata de un perfil de empresas muy apalancadas, por lo que la reducción de los tipos de interés les viene muy bien. Además, estas últimas tienen un perfil defensivo, lo que nos protege en caso de una desaceleración económica, porque tienen un negocio que depende menos del ciclo. También añadimos compañías ligadas al sector de la salud, que tienen ese corte defensivo.
P. ¿Qué empresas del sector sanitario tienen en cartera?
R. Tenemos a la danesa Novo Nordisk, que está revolucionando el tratamiento de la obesidad, y la inglesa Astrazeneca, que tiene tratamientos muy prometedores contra el cáncer. Es increíble pensar que hoy en día, la mitad de los pacientes a los que se les diagnostica esa enfermedad, logran curarse. Algo impensable hace una década.
P. ¿Tienen alguna exposición a la nueva tendencia de la inteligencia artificial?
R. Sí, nuestra primera posición en cartera es la neerlandesa ASML, que es el principal productor mundial de las máquinas de litografía para fabricar microchips. Con las dos mencionadas anteriormente, son de las pocas compañías europeas que son auténticos líderes globales.
P. ¿No teme que estas empresas coticen a precios demasiado altos?
R. Sí es algo que puede dar algo de vértigo. Pero para eso tenemos analistas muy especializados que siguen de cerca a estas compañías y van viendo si cumplen las previsiones de beneficios que prometen. Creemos que viendo su media histórica de valoración cotizan aún a unos precios razonables. Además, son temáticas en las que queremos estar, como la lucha contra la obesidad y el cáncer, junto al auge de la inteligencia artificial.
P. ¿En qué países invierte más?
R. Tenemos algo de querencia por las compañías francesas y las alemanas, por la mayor experiencia de nuestros analistas en estos dos mercados. También nos gustan muchas empresas suizas. Y yo, por mi origen y mi trayectoria, tengo algo sobreponderadas las cotizadas españolas. Por ejemplo, una de las principales posiciones es Iberdrola, que ha ido muy bien este año. También tenemos algunos bancos.
P. ¿Está especializado en algún sector?
R. Sí, en mi etapa como analista llevaba por ejemplo el sector de los materiales de construcción, así que es una temática que controlo muy bien. Eso me ha hecho incluir en cartera compañías como la irlandesa CRH, que fabrica cemento y ladrillos. Aunque ya cotiza en Estados Unidos y vende en todo el mundo, la seguimos considerando europea, porque tiene su sede en Dublín.
P. ¿Tienen más acciones pequeñas o grandes?
R. Tenemos un cierto sesgo hacia cotizadas de pequeña y mediana capitalización. Para desmarcarnos de lo que hacen los índices, tenemos que incorporar pequeñas industriales o químicas de Alemania, o de Francia. Eso compensa nuestras posiciones en gigantes como ASML o Novonordisk.