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Maurici Lucena: “Aena seguirá repartiendo el 80% del beneficio en dividendos”

El gestor aeroportuario dispara el 61% la remuneración a los accionistas con cargo a 2023 tras ganar 1.631 millones, un 13% más que en 2019

Javier Fernández Magariño
Aena
El presidente de Aena, Maurici Lucena, entre el vicepresidente de la compañía, Javier Marín, y la directora general Comercial e Inmobiliaria, María José Cuenda.Carlos Muina

Aena se ve con fuerzas para mantener una alta remuneración a los accionistas en los próximos años. El reciente dato histórico de tráfico en la red española de aeropuertos, con 283 millones de viajeros en 2023 (un 16,25% más que en 2022), se ha traducido en un beneficio para la compañía de 1.631 millones, un 81% por encima del resultado de 2022 y un 13% mejor que el obtenido antes de la pandemia. Tal desempeño va a permitir el reparto de un dividendo de 7,66 euros por acción, que será propuesto en la junta fijada para el 18 de abril. El pago será en efectivo y se realizará el 7 de mayo, según ha informado la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Las acciones suben un 1,3% en Bolsa.

El premio a los accionistas, creciente en un 61% sobre los 4,75 euros que fueron distribuidos con cargo a 2022, vuelve a responder a la regla impuesta en la casa de repartir un 80% del beneficio (pay out). Y así seguirá siendo, según ha confirmado el presidente Maurici Lucena en una comparecencia ante los medios de comunicación. “Nos encontramos muy cómodos con un pay out del 80% a la vista de que nuestro ratio de deuda frente al ebitda es bajo, de dos veces”, ha señalado Lucena.

Aena, eso sí, remarca que el resultado neto se ha visto impulsado por extraordinarios financieros: 36 millones por la remuneración de depósitos en Brasil, 11 millones por tipos de cambio favorables o 23,2 millones por la valoración de derivados. Otras palancas han sido las de la reversión de provisiones por 155 millones por el hundimiento del tráfico en Brasil durante la pandemia; el salto en los ingresos internacionales hasta los 616 millones (+26,9%); un alza del 14% en las ventas comerciales por viajero (de 4,8 a 5,8 euros), o una fuerte caída en el gasto eléctrico.

El ebitda de la firma pública cotizada fue de 3.022 millones, con un incremento del 45,4% frente a los 2.079 millones declarados en 2022. Este beneficio bruto de explotación, que deja un margen de casi el 59%, también vuela sobre los 2.766 millones que Aena cosechó en 2019. De este modo, se adelanta un año el logro del objetivo fijado en el plan estratégico 2022-2026 de retornar al ebitda anterior a la crisis sanitaria.

La actividad muy por encima de lo previsto, junto a haber llegado a la mitad del camino del citado programa estratégico, ha hecho que Aena vaya a actualizar el próximo 7 de marzo su hoja de ruta. Antes, el día 1, entra en vigor un nuevo marco tarifario por el que la operadora ha obtenido una subida del 4,09% (40 céntimos de media por viajero) para compensar costes que en 2022 estuvieron marcados por la alta inflación. El ingreso máximo anual ajustado por pasajero (IMAAJ) que cobra Aena llegará a los 10,35 euros, desde los actuales 9,95 euros.

De igualar el tráfico gestionado en 2023, con los citados 283 millones de viajeros, Aena obtendría un ingreso extra de 113 millones por el negocio aeronáutico o regulado gracias a las nuevas tarifas. Pero la estimación de viajeros, actualmente en revisión, se irá cerca de los 300 millones.

Respecto al reciente desencuentro con las aerolíneas, que pedían moderación tarifaria, la empresa que preside Maurici Lucena ha defendido que sus precios seguirán siendo inferiores a los de 2019 y que habrán descendido un 11%, en términos nominales (sin contar la inflación), entre 2015 y 2023. En el mismo periodo, la inflación ha sido del 21%, lo que hace que Aena hable de tarifas un 32% por debajo de las de 2015.

Mejora en los negocios aeronáutico y comercial

La facturación en el pasado ejercicio fue de 5.142 millones, con una mejora del 21,3%. La parte regulada del negocio cosechó unas ventas de 2.858 millones de euros, un 18,5% más que en 2022. Los ingresos comerciales, por su parte, fueron de 1.552 millones. Esta última cifra ya es más alta que la de 2019 en un 17,3% y ofrece un incremento del 25% sobre la de 2022. El negocio inmobiliario, aún por desarrollar su potencial, aporta ya 105 millones, casi un 20% más que en 2022. Pero entre los ingresos comerciales resaltan las tiendas libres de impuestos (duty free) con 411 millones (+23,5%), los restaurantes en las terminales entregan 325 millones (+33,4%), el comercio convencional facturó para Aena 134 millones (+48%) y los aparcamientos pagaron 180 millones (+23%).

La inversión pagada ha llegado a los 1.384 millones, de los que 621 millones se deben a compromisos adquiridos en Brasil por la concesión de nuevos aeropuertos (BOAB).

Aena ha mantenido la deuda neta en los términos del cierre de 2022, con 6.222 millones, pero la escalada en el ebitda favorece una rebaja de la ratio de endeudamiento de 3 a 2,06 veces. El gestor aeroportuario también destaca esta mañana la generación de un efectivo neto por las actividades de explotación de 2.219 millones, un 19% más.

La partida de gastos de aprovisionamiento, personal y otros de explotación crece en casi 130 millones de la mano de una mayor actividad, hasta los 2.218 millones. A favor de Aena ha jugado, en todo caso un abaratamiento del 45% en la factura energética, hasta los 121 millones. Sin embargo, el salto en el tráfico deja incrementos del 20,6% en la partida de seguridad, hasta los 165 millones; el mantenimiento ha merecido 154 millones, un 6,2% más, y el pago de impuestos se ha llevado 157 millones, lo que conlleva una ligera subida del 0,4%.

Sumado el tráfico en España, el aeropuerto de Londres-Luton y los aeropuertos del Nordeste de Brasil, el número de viajeros en las infraestructuras de Aena creció un 16%, marcando 314 millones. Al finalizar el pasado ejercicio, la española gestiona el 20% del tráfico de Brasil. A los seis aeropuertos que opera en el nordeste del país, ha sumado entre octubre y noviembre de 2023 los 11 activos ganados en subasta en agosto de 2022 por un plazo de 30 años con cinco más de posible prórroga. Entre ellos destaca el aeropuerto de Congonhas, en Sao Paulo, el segundo más transitado del mercado brasileño.

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Sobre la firma

Javier Fernández Magariño
Es redactor de infraestructuras, construcción y transportes en Cinco Días, donde escribe desde junio de 2000. Ha pasado por las secciones de Especiales, Cinco Sentidos, 5D y Compañías siguiendo la información de diversos sectores empresariales. Antes fue locutor de informativos en la Cadena Cope, además de colaborar en distintos medios de Madrid.
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