Puente ve inevitable la subida tarifaria en Aena, hasta en 40 céntimos por viajero
El grueso del incremento será por el alza de costes entre 2021 y 2022, recogido en el índice P de la tarifa
El próximo 1 de marzo habrá subida tarifaria en los aeropuertos españoles, tal y como propuso Aena el pasado verano y ha ratificado esta mañana el ministro de Transportes, Óscar Puente. Durante su intervención en el Nueva Economía Forum, Puente ha adelantado que el Ejecutivo va a dar luz verde a la aplicación del conocido como índice P en las tarifas que el gestor aeroportuario cobra a las aerolíneas. Según estimaciones de la empresa pública, el alza total previsto estaría en un máximo de 40 céntimos por viajero, pero aún depende de lo que marque la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
“Tenemos las tasas más bajas y los mejores aeropuertos. La aplicación del P es inexorable y vamos a introducir incentivos para desarrollar tráfico de aerolíneas internacionales a aeropuertos regionales”, ha afirmado el ministro. Se espera que el asunto pase por el Consejo de Ministros del 30 de enero. Los 40 céntimos que pueden subir las tarifas por viajero suponen unos 115 millones de euros en un año para Aena (tomando como base los 283 millones de viajeros de 2023) y las compañías aéreas los trasladan a los billetes que pagan los pasajeros.
Aena defiende un alza del 4,09%, ante lo que las compañías aéreas han venido demandado al Gobierno moderación con el fin de consolidar la recuperación del tráfico aéreo, que ha cerrado 2023 con un récord en España de 283 millones de viajeros. La aplicación del índice P de la tarifa, del que dependen 3,5 puntos de la subida, se debe a la corrección de costes por la prestación de los servicios aeroportuarios. La CNMC ya lo dio por bueno en un informe publicado el 8 de junio. Y es que la corrección tarifaria se da en respuesta a un IPC medio del 8,4% en 2022, ejercicio en el que Aena registró un incremento en el coste energético, como principal variación, superior al 40%. También suman el 3,5% de mejora salarial en la empresa pública, o el 1,8% extra por la limpieza de los aeropuertos.
El argumentó de Aena ante la CNMC es que estos encarecimientos en su base de costes no pudieron ser compensados con recortes si se pretendía mantener la calidad del servicio fijada en el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA) 2022-2026. Con los 3,5 puntos prácticamente en el bolsillo, Aena defiende otras seis décimas sobre las que debe decidir el regulador.
El demandado incremento de las tarifas por parte de Aena dejaría el ingreso máximo anual ajustado por pasajero (IMAAJ) en 10,35 euros, frente a los actuales 9,95 euros. Desde la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) se ha reconocido en los últimos meses que en España ha habido diez años de apoyo al sector con la congelación o reducción de tarifas desde 2014, mientras aeropuertos europeos como el de Ámsterdam o Londres las subían con doble dígito. Pero ALA también remarca que las aerolíneas han salido fuertemente endeudadas de la crisis sanitaria y precisan realizar esfuerzos financieros en estos momentos para bajar el apalancamiento.
El marco tarifario de Aena, basado en el referido ingreso máximo anual por pasajero ajustado (IMAAJ), sigue afectado por la Ley 18/2014, que en su disposición transitoria sexta fijó un periodo transitorio entre 2015 y 2025 en el que la subida máxima del citado IMAAJ debe ser del 0% antes de variaciones de costes justificadas cada año.
Desde el Ministerio de Transportes se pone en contexto la inminente subida en comparación con los tiempos previos al Covid-19, y se recuerda que los precios que pagan las aerolíneas por operar en la red de Aena serán más bajos aún que los de 2019.
El índice P, al que se ha referido Puente, recoge oscilaciones en costes fuera del control del operador aeroportuario y que afectan directamente a su actividad. En este caso corrige más del 52% del volumen de costes regulados de Aena y es, junto al Parámetro X (costes anticipables en el momento de la redacción del Documento de Regulación Aeroportuaria DORA), la principal variable en el cálculo de las tarifas. La factura energética, costes laborales propios, servicios de navegación aérea, de limpieza o el de seguridad, son algunas de las partidas actualizadas con el Índice P.
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