Gigas amplía su centro de datos en Lisboa y se refuerza en el mercado ibérico

La tecnológica española, que ha invertido 70 millones en Portugal desde 2019, está abierta a adquirir y operar un ‘data center’ en España

Un empleado de Gigas en el centro de datos de la compañía en Lisboa (Portugal).

Gigas continúa reforzando su posición en Portugal, un país donde aterrizó en 2019 con la compra de AHP y en el que ya ha realizado una inversión total de 70 millones de euros. La compañía española, especializada en servicios convergentes de telecomunicaciones, ciberseguridad y cloud a empresas, anunció ayer una nueva inversión de tres millones para ampliar el centro de datos de Oni, su filial portuguesa, en Lisboa. La cifra se elevará hasta cinco millones en un plazo aproximado de 18 meses, pues el objetivo es duplicar el número de salas que tiene actualmente el centro hasta un total de diez.

La actual inversión permite a la tecnológica reforzar las capacidades eléctricas, tecnológicas y de refrigeración de la instalación, desde donde ofrecen servicios de alojamiento, de infraestructura como servicio, de continuidad de negocio, además de toda la capacidad de conectividad de Oni y los servicios cloud y de ciberseguridad de Gigas.

“Esta inversión representa una fuerte apuesta por el mercado ibérico, sobre todo en lo que respecta a servicios cloud y de centros de datos. Estamos ante una de las expansiones más importantes y eficientes realizadas por Gigas para que el centro de datos de Lisboa, data center que actualmente cuenta con la mayor capacidad disponible de todos los centros de datos de la ciudad, sea un punto de referencia importante y de excelencia”, afirmó Diego Cabezudo, CEO y cofundador de Gigas.

El directivo destacó que la oferta de centros de datos en Portugal es actualmente “muy limitada y escasa”, pese a que la demanda de los servicios que se ofrecen desde este tipo de instalaciones es creciente. “La intención de Gigas es contribuir a aumentar esa oferta y poder ofrecer servicios, de los que ya disfrutan grandes empresas y operadores portugueses, a nuevos clientes que quieran contar con las ventas de los servicios convergentes de telecomunicaciones, ciberseguridad y cloud que ofrecemos”, añadió Cabezudo.

Simplificar la operativa

José Antonio Arribas, director de operaciones y cofundador de Gigas, destacó como hecho diferencial que el centro de datos de la compañía esté en la zona metropolitana de Lisboa, “algo que simplifica mucho la operativa del día a día de nuestros clientes”. Otro elemento distintivo, dijo, es que la empresa posee un anillo de fibra de 100 gigas entre el data center de Lisboa y el de Madrid, “lo que nos permite cubrir las necesidades de clientes que tienen presencia en España y Portugal, compartiendo toda la infraestructura como si estuvieran en un único data center”.

La instalación de Lisboa utiliza 100% energía verde suministrada por Acciona y tiene redundado tanto la energía, la refrigeración y la conectividad, con tres salidas de fibra óptica. Además del de Lisboa, Gigas tiene centros de datos en Oporto, Dublín, Madrid (dos), Barcelona, dos en Latinoamérica y otro en Norteamérica. Pero en estos casos no son centros propios, sino espacios contratados a proveedores de colocation como Equinix, Interxion o Telmex.

Cabezudo señaló que no descartan adquirir en propiedad un centro de datos en España y operarlo como hacen con el de Lisboa, dadas las crecientes necesidades de los clientes de este país en servicios de alojamiento y de cloud. Arribas reconoció que múltiples clientes están demandando a Gigas tener soluciones en cloud privada con equipos propios, lo que haría interesante dicha adquisición.

200 personas en Portugal

Adicionalmente a la inversión que han hecho en el centro de datos de Lisboa, Gigas ha reforzado su equipo en Portugal, por los servicios de cloud que han introducido en el país luso y poder soportar los servicios de telecomunicaciones que ofrecen en España, los cuales se operan desde Portugal, según aclaró el CEO de la compañía.

La plantilla de Gigas a nivel global asciende ya a unos 370 profesionales, 200 de los cuales trabajan en sus filiales en Portugal. El negocio de la compañía en este país representa casi el 50% de sus ingresos. La empresa, cotizada en el BME Growth, prevé cerrar este año con una facturación superior a los 66 millones de euros frente a los más de 61 millones del año pasado. En España, la compañía cuenta con una plantilla de 150 personas.

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