Gamesa negocia la venta a ABB de su filial de generadores por 200 millones
La operación afecta a las plantas de Madrid, Valencia y Cantabria
La venta de activos no estratégicos es una de las palancas que ha diseñado el equipo directivo de Siemens Gamesa (SG) para intentar volver a la rentabilidad. De hecho, el grupo eólico negocia la venta de parte de su negocio industrial a ABB. En concreto, la multinacional helvético sueca está interesada por la división de generadores y convertidores eléctricos de SG. El importe de la operación rondaría los 200 millones y fuentes de la industria señalan que las negociaciones han entrado en la última fase, embocando el acuerdo final, según ha podido saber CincoDías.
El área que quiere adquirir la corporación con sede en Zúrich (Suiza) está integrada por una serie de fábricas repartidas por España, China e India. Tres de ellas están ubicadas en Madrid, Valencia y Cantabria.
Con esta inversión, ABB reforzaría su presencia industrial en España, donde cuenta con cinco centros de producción e ingeniería atendidos por más de 1.700 trabajadores. El mercado nacional aportó a ABB unos ingresos de 800 millones el año pasado.
Jochen Eickholt, consejero delegado de SG, ya adelantó que estaban en venta ocho de los centros de España, salvo la planta de ensamblaje de equipo de Ágreda (Soria).
Dentro de la hoja de ruta del Plan Mistral, el grupo eólico ha ofrecido esta red industrial a sus proveedores. Quedarían cinco centros a la venta tras los tres que adquiriría ABB.
SG tiene 3.000 suministradores en España, donde el año pasado realizó compras por valor de 1.401 millones, un importe superior en un 25% al realizado en 2021.
Estos proveedores están ahora preocupados por los fallos que SG ha detectado en una serie de aerogeneradores ya entregados o a punto de hacerlo, estos últimos pertenecientes a la “familia” de la turbina terrestre 5.X, que puede alcanzar una capacidad unitaria de 6 MW, la mayor del mercado en estos momentos.
El grupo eólico ha calculado que tendrá que realizar una provisión como mínimo de 1.000 millones para hacer frente a los pagos que se derivarán por estos fallos. La entidad prevé que tendrá que hacer frente, por una parte, a reclamaciones de los clientes que ya los tienen en funcionamiento y han detectado errores en sus complejos renovables o a aquellos que los reciban con retraso, ya que las demoras también se penalizan. Además, los ingenieros de SG están calculando los importes que podrían tener que desembolsar por las garantías de funcionamiento, que son a varios años, y pueden alcanzar a los proveedores. La prioridad de Jochen Eickholt, tal y como contempla el Plan Mistral, es la de lograr la vuelta a los beneficios, ya que parece que no termina de asentarse un negocio que procede de la fusión de los activos eólicos de Siemens y de Gamesa en 2017.
De hecho, SG ha registrado unas pérdidas de 2.485 millones en los tres últimos años, a las que se han sumado los resultados negativos de 884 millones del primer trimestre del ejercicio en curso, que SG arranca al 1 de octubre.
Fin del ERE
Desde la salida de Bolsa de SG el pasado 7 de febrero, tras 22 años de cotización, ahora sus cuentas consolidan en el balance de su accionista al 100%, Siemens Energy (SE), cuyo presidente es Christian Bruch, que ocupa el mismo cargo en la filial eólica de la división energética de la multinacional alemana Siemens .
El grupo de Múnich (Alemania) ha notado para mal la consolidación de las cuentas de SG en su balance. Al cierre del primer semestre ha disparado sus pérdidas un 56,8%, hasta 787 millones.
Si por el lado industrial siguen los ajustes con la operación de venta de fábricas a ABB, los recortes también alcanzan al ámbito laboral. El plan de 2.900 despidos en Siemens Gamesa, sobre una plantilla de 27.300 trabajadores repartidos por más de 90 países, va concluyendo.
El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) aplicado en España se ha dado por finalizado. El primer planteamiento del grupo suponía la salida de 475 personas, el 9,31% de una plantilla de 5.097 profesionales.
El ajuste estaba muy centrado en el área administrativa, en concreto en las oficinas de Pamplona (Navarra), Madrid y Zamudio (Bizkaia). En esta última localidad tiene su sede la filial de SE. Tras las negociaciones con los sindicatos, el recorte final ha sido de 231 empleados, el 4,62% del total.
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