La empresa española que tira semillas desde un dron y ahora se va a Silicon Valley
CO2 Revolution ha reforestado 1.200 hectáreas con semillas mejoradas en laboratorio Ha sido elegida en un programa del Ministerio de Industria para expandir su negocio a EE UU
El cambio climático ha hecho de las sequías y los incendios episodios cada vez más comunes y virulentos en todo el planeta. Juan Carlos Sesma, un emprendedor español, comenzó a pensar en 2016 cómo aportar su granito de arena para combatir la deforestación que generaban y se le ocurrió una idea. Junto a un fraile cisterciense, Sesma plantó distintos tipos de semillas alrededor del monasterio de la Oliva, en Navarra, mejorándolas hasta que dio con lo que ha denominado las iSeeds, unas semillas reforzadas en laboratorio con una alta capacidad de germinación.
Dos años más tarde, en 2018, Sesma fundó la compañía CO2 Revolution, que se dedica a lanzar estas semillas desde drones sobre zonas de difícil acceso en las que no se puede plantar con métodos tradicionales.
“La compañía se constituyó con la misión de combatir el cambio climático. Para ello se definieron dos objetivos. En primer lugar, la generación de ecosistemas a gran escala mediante la plantación de árboles, arbustos y pastos de especies autóctonas y biodiversas”, indica esta pequeña empresa española.
“En segundo lugar, la reducción de emisiones de CO2 de la atmósfera a través del cálculo y compensación de la huella de carbono de empresas para mejorar su estrategia de sostenibilidad. Todo ello buscando siempre la máxima eficiencia y rentabilidad”, añade en un comunicado.
Ahora, tras cinco años de actividad, CO2 Revolution ha sido elegida para el programa Desafía San Francisco 2022, un programa de inmersión y acompañamiento a startups tecnológicas para que puedan escalar su negocio más allá de las fronteras españolas e introducirse en el mercado estadounidense. Este programa lo organiza el Icex, un organismo dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
Si bien la compañía no da cifras, prevé “un crecimiento notable” en el próximo ejercicio. “La empresa planea realizar un mayor número de reforestaciones y pronostica un robustecimiento en el mercado de bonos de carbono”, señala esta pyme que “hasta la fecha ha plantado un millón y medio de árboles, en más de 1.200 hectáreas”, con los que han logrado sacar 300.000 toneladas de CO2 de la atmósfera.
Dichos árboles los ha plantado en lugares como la provincia gallega de Pontevedra, donde ha participado, junto a la empresa Rointe, de la reforestación de la región de Borela, castigada por diversos incendios en los años 2006, 2016 y 2017. También ha colaborado con Iberdrola en la reforestación de Cortes de Pallás, en la Comunidad Valenciana, donde en 2012 los fuegos arrasaron 30.000 hectáreas.