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Tribuna
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El Volcán Cumbre Vieja, sus fajanas y delimitación de aguas

¿Puede España aumentar su extensión marítima como resultado del aumento de la superficie de la isla de La Palma?

La Playa de los Guirres, en una foto de archivo.
La Playa de los Guirres, en una foto de archivo.MIGHTYMIGHTYMATZE

Desde el pasado domingo 10 de octubre de 2021, la colada norte del volcán Cumbre Vieja amenaza con la creación de una segunda fajana en el litoral del municipio de Tazacorte, hacia la playa del Perdido. Este nuevo delta, que como el primero, que aumentaría el tamaño de la isla se localizaría a unos 500 metros de la primera plataforma que sepultó la Playa del Guirre hace tres semanas.

El Convenio de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, aprobada en Montego Bay el 10 de diciembre de 1982 (en vigor desde el 16 de noviembre de 1994) ha sido firmado por 167 estados con el objetivo de establecer un orden jurídico de los mares y océanos y estipula que la extensión marítima que domina cada Estado se calcula desde la línea de base, que es la franja imaginaria que establece el límite de sus aguas interiores. De esta forma el Convenio de Montego Bay regula el mar territorial, que es la extensión de 12 millas náuticas delimitadas a partir de la línea de base de cada Estado. Por otro lado, la zona contigua añade otras 12 millas náuticas donde el Convenio concede a los Estados medidas como: "prevenir las infracciones de sus leyes y reglamentos" y "sancionar las infracciones de esas leyes y reglamentos" que se cometan en su territorio o en el mar territorial.

La zona económica exclusiva (ZEE), que no se puede extender más allá de 200 millas, es la extensión marítima donde prevalece la jurisdicción de cada nación y le otorga determinados derechos como el de la explotación y administración de recursos naturales, la utilización de instalaciones y creación de islas artificiales, acciones de investigación marina, etc.

Por último, la plataforma continental comprende el lecho y subsuelo de las áreas submarinas que no puede exceder de las 350 millas náuticas contadas desde la línea de base.

Ahora: ¿Puede España aumentar su extensión marítima como resultado del aumento de la superficie de la isla de La Palma?, ¿Afecta dicho aumento a la división de las aguas del archipiélago canario?

En primer lugar, veamos si ello es posible hacia el oeste. España solicitó la ampliación de su extensión marítima a la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de la Convención de Naciones en 2014, y partiendo de la línea de base de la isla de El Hierro (por la erupción del volcán submarino Tagoro) ampliando el dominio de la zona marítima en casi 300.000 kilómetros cuadrados en el Atlántico. Esta expansión amplió al área de la plataforma continental, lo cual permite a España dominar el subsuelo, otorgando el derecho de explotación de recursos naturales.

Hacia el este: Dado el derecho que ostenta cada país para delimitar su ZEE puede entrar en conflicto con otra delimitación de un Estado con costa adyacente, o cuyas costas estén enfrentadas. Montego Bay propone, en estos casos, que dichos Estados acuerden mutuamente una delimitación de sus ZEE en base al derecho internacional. Si ese acuerdo no llega a ninguna parte, entonces los Estados podrán accionar los procedimientos previstos ante la Corte Internacional de Justicia.

Pues bien, en el pasado mes de enero, Marruecos aprobó dos normativas mediante las cuales extendía su frontera marítima hacia España y el Sáhara Occidental incluyendo en su nueva delimitación aguas solicitadas por nuestro país en el territorio del sur de Canarias suscitando una gran preocupación por los eventuales solapamientos con el espacio marítimo español.

En concreto, con las dos normativas, Marruecos establece sus aguas territoriales en 12 millas, delimita su zona económica exclusiva en 200 millas, y decide ampliar su plataforma continental hasta 350 millas. De esta forma, extendería su tutela jurídica sobre el espacio marítimo incluyendo el Sáhara Occidental y en el noreste fronterizo con Argelia. Por el oeste, la ampliación hasta las 350 millas incluiría una parte de las aguas canarias que España ya había solicitado a la ONU en 2014, cuando decidió ampliar su plataforma continental en 350 millas, el máximo permitido.

Marruecos ha insistido desde el comienzo de este proceso legislativo que no pretende imponer a España "hechos consumados", y ha subrayado que la demarcación de la frontera marítima se hará de mutuo acuerdo, conforme a la legislación internacional.

En conclusión. La solicitud por parte de España de una ampliación, hacia el oeste, de la plataforma continental, partiendo de la línea de base de la isla de La Palma, parece que no es factible dado que se solicitó en base a coordenadas situadas, más al Oeste, en la isla de el Hierro en 2014.

La declaración de las aguas territoriales y de la ZEE por parte de Marruecos suponen un mensaje principalmente interno pues su validez jurídica internacional, debe consensuarse con España, en caso contrario se habrá de recurrir al Tribunal Internacional de Justicia de La Haya.

Daniel Bosch Wood, of counsel Abencys.


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