Sabadell acude al mercado para captar 500 millones en deuda subordinada
No prevé elevar el importe con independecia de la demanda
Las primeras semanas del año son una venta de oportunidad para que empresas y bancos acudan al mercado en busca de financiación. El exceso de liquidez y el apetito de los inversores son ingredientes perfectos para obtener recursos en el mercado a precios atractivos. Sabadell, consciente de esta realidad, no está dispuesto a dejar pasar la ocasión y un día después de que Abanca colocara 375 millones en deuda AT1 al 6%, el viernes la entidad que preside Josep Oliú captó 500 millones en deuda subordinada con vencimiento en abril de 2031 en la que es su primera emisión del año.
Desde la puesta en marcha de la operación Sabadell tenía claro que con independencia de la demanda su objetivo estaba en captar 500 millones y así fue. El apetito de los inversores, algo que se dejó sentir en la demanda que alcanzó los 1.800 millones, no incitó a la entidad a elevar el importe. Lo que sí permitió fue rebajar el coste. La emisión partía con un precio de 330 puntos básicos sobre mid swap (tipo de interés libre de riesgo) y se cerró finalmente a 295 puntos básicos. Es decir, 35 puntos básicos menos.
Aunque los bonos tienen un vencimiento de 10 años, los inversores disponen de una primera fecha de amortización del cupón en abril de 2026. A partir de entonces, se restablecerán los tipos y los bonos devengarán un cupón anual que tomará como referencia para su cálculo el tipo de interés libre de riesgo a cinco años más el diferencial al que se cerró la operación.
La última vez que Sabadell vendió deuda subordinada fue justo hace un año cuando adjudicó 300 millones. Además de esta operación a lo largo del pasado ejercicio la entidad captó otros 2.000 millones en distintos tipos de deuda. La mitad de este importe (1.000 millones) fue a través de la venta de cédulas hipotecarias, un instrumento idóneo para obtener liquidez. Otros 500 millones se adjudicaron en bonos vender y los 500 millones restantes en deuda sénior no preferente.
Sabadell, Citi, Credit Agricole, Goldman Sachs, HSBC y Nomura actúan como bancos colocadores encargados de llevar a buen puerto la operación. Los títulos emitidos bajo ley española cotizarán en el mercado irlandés y contarán con una calificación de Baa3, BBB, BBB, AL de acuerdo a los criterios de Moody´s, S&P, Fitch y DBRS.