La patronal hotelera exige al Gobierno un plan de choque para salvar al turismo
Reclama ERTE bonificado al 100% hasta marzo de 2021 y exoneración del IBI o de las tasas municipales
El sector hotelero está contra las cuerdas. Seis meses sin ingresos y la perspectiva de que no habrá prácticamente negocio hasta la Semana Santa de 2021 han disparado todas las alarmas entre las 15.000 empresas que integran la industria, que han lanzado un mensaje de ayuda a través de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat). En una carta remitida a la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, el presidente de Cehat, Jorge Marichal, reclama la puesta en marcha de un plan de choque para salvar al turismo en España. "Necesitamos un plan de reactivación del turismo español y luego un tratamiento específico por territorios que permita, por ejemplo, abordar la temporada de invierno para aquellos destinos que la tengan, o preparar a medio plazo, para aquellos otros destinos que trabajarán a partir de marzo de 2021", reclama en la carta, en la que asegura que no se pueden improvisar medidas como en el pasado. "Lo que está en juego es la supervivencia del sector turístico español".
La petición se divide en tres bloques (laboral, fiscal y sanitario). En material laboral, la patronal reclama la exoneración total de cotizaciones para aquellos trabajadores que estén en ERTE (en la actualidad hay unos 424.000 personas en esa situación) y a cambio las empresas se harán cargo de las cargas sociales de los trabajadores que se incorporen. "Nos encaminamos a un nuevo cierre de hoteles, con el consiguiente reenvío a un ERTE a gran parte de la plantilla. Por tanto, de nada servirá que bonifiquen ampliamente a la plantilla en activo si no hay plantilla en activo. Necesitamos unos ERTE ágiles que permitan la entrada y salida de trabajadores en función de la coyuntura turística con exoneración total de la Seguridad Social de los que se quedan dentro del ERTE, no de los que salen".
En materia fiscal, la misiva abunda en la necesidad de una exoneración de los tributos que soportan los hoteles, como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y las tasas municipales, que son una de las principales fuentes de recaudación de los ayuntamientos turísticos.
La patronal hotelera retoma la petición, trasladada ya al Ejecutivo a principios de verano, de establecer pruebas en destino a los turistas extranjeros que lleguen a España. "Si un turista que llega a España no puede garantizar que se está libre de COVID-19 (PCR con 48 horas máximo antes del viaje), deberá hacérsele un test rápido a la llegada al primer aeropuerto español que pise. Este test deberá pagarlo el cliente. Al finalizar su estancia en destino y antes de regresar a su país, deberá realizarse una nueva prueba que garantice que está libre de COVID-19.Este nuevo test lo pueden pagar los hoteleros y el cliente, de forma conjunta", asegura Marichal. En su opinión, estas medidas tendrían un doble efecto beneficioso. "Evitar que el el cliente tenga que sufrir un confinamiento o cuarentena a la llegada a su país y, por otro lado, blinda al empresario frente a posibles demandas y reclamaciones por contagios en destino que,como sabes, suele ser práctica común por algunos tipos de clientes", asegura.La patronal también considera prioritario fijar medidas como el pasaporte sanitario, que permitan la trazabilidad del cliente durante su estancia en destino
Marichal retoma la idea de un corredor turístico entre Canarias y los Países Nórdicos, tal y como trató de hacer, no con mucho éxito, el pasado mes de julio Baleares con Alemania. "Para ello ya se ha contactado con las embajadas de los países escandinavos (Noruega, Suecia, Finlandia y Dinamarca) para ofrecer nuestra colaboración, tanto desde el sector privado como desde el Gobierno regional de Canarias, en aquellas medidas que dichos estados establezcan para garantizar unas vacaciones seguras a sus habitantes, incluyendo elestablecimiento de corredores sanitarios".
Otros colectivos afectados por el derrumbe
Exceltur. El lobby prevé que el turismo perderá 98.753 millones de euros en 2020, lo que supone una merma adicional de 15.620 millones respecto a la última previsión y un recorte del 64,7% con respecto a lo alcanzado en 2019. Exceltur anticipa que el impacto sobre el empleo será “de dimensiones inéditas”, ya que a cierre de julio, las grandes actividades turísticas ya contaban con 823.000 empleados menos, de los que 517.000 estaban en un ERTE y 306.000 habían perdido su empleo.
Agencias de viajes. Carlos Garrido, presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV), asegura que solo han vendido un 10% con respecto a las cifras del verano de 2019 y que es prioritario extender los ERTE hasta marzo de 2021. “El 80% de los costes de producción de una agencia son los salarios”
Ocio. Guillermo Cruz, presidente de la Asociación Española de Parques de Atracciones (AEPA), reclamó una rebaja del IVA al 10% ante el desplome de ingresos del 80%. “Somos los únicos proveedores de servicios que no han sido devueltos al tipo reducido de IVA del 10% tras la última crisis financiera de 2008”, lo que, en su opinión, podría llevar a cierres y despidos.