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Así evita accidentes el sistema de cambio de carril de un Tesla con autopilot (vídeo)

Dos ejemplos de que la tecnología funciona.

Tesla circulando con autopilot.
Tesla

Aunque Elon Musk afirma que en poco tiempo sus vehículos serán capaces de llevar a cabo una conducción autónoma completa, con el nivel máximo que exijan las autoridades de los distintos países, en realidad todavía queda mucho camino por recorrer. Sobre todo en la parte de los conductores, que tienen que confiar más en las habilidades de sus vehículos cuando circulan solos.

Y hoy os traemos dos ejemplos de que, mientras llega ese momento de confianza plena, los coches siguen demostrando sus habilidades a la hora de ver, comprender y obrar en consecuencia de lo que perciben a través de las muchas cámaras y sensores que llevan instalados.

Dos cambios de carril abortados

En los dos ejemplos que os traemos hoy, los vehículos Tesla muestran cómo funciona su sistema de cambio de carril cuando tiene el autopilot activado y el conductor mantiene, siempre, las manos sobre el volante ya que debe vigilar si en algún momento el coche podría necesitar su ayuda.

Como os decimos, en el primer vídeo puede verse una carretera con un tráfico moderado donde empiezan a detenerse con cierta brusquedad los coches que circulan justo por delante. El Tesla inmediatamente reduce su velocidad para evitar un colisión en cadena y, cuando ve que en el carril que tiene a su derecha hay mejores expectativas de no tener un accidente, decide cambiar.

Con lo que no cuenta el sistema de guiado es que el conductor del coche que circula justo detrás, ha tenido la misma idea y entra en el carril derecho en el instante que empieza a hacerlo el Tesla. El resultado se ve nítidamente en el vídeo, y cómo se tiñe de rojo la imagen del vehículo que se ha convertido en un peligro. De esta manera, el Tesla aborta la maniobra para dejarle pasar y, una vez que lo ha hecho, termina el cambio de carril sin problemas.

El segundo ejemplo es bastante parecido al anterior solo que tiene lugar bajo circunstancias más complicadas: hay lluvia, el coche viene de incorporarse al carril derecho y, cuando quiere volver al izquierdo, detecta la llegada de otro a mucha velocidad, lo que le obliga a mantenerse en el mismo sitio hasta que le supere.

Dos ejemplos de lo mucho que están avanzando estos sistemas y que apuntan a que, cuando todos los coches circulen bajo las mismas normas de respeto a las distancias de seguridad, velocidades máximas y acatamiento de lo que indican las señales de tráfico... ¿será el momento de pensar que nuestros viajes serán mucho más seguros?

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