La industria alemana bajó un 1,9% en abril, la mayor caída desde 2015
El Banco Central germano recorta su previsión de crecimiento del PIB hasta el 0,6%
La producción industrial de Alemania registró el pasado mes de abril una caída del 1,9% respecto al mes anterior, lo que representa el mayor descenso mensual del dato de actividad fabril de la principal potencia económica europea desde agosto de 2015, según informó la Oficina Federal de Estadística de Alemania (Destatis).
En comparación con abril del año anterior, el dato de producción industrial de Alemania registró un descenso del 1,8%, frente a la bajada interanual del 0,9% observada en marzo.
En el mes de abril, excluyendo los sectores de la construcción y la energía, el dato de producción industrial experimentó una caída del 2,5%.
Por su parte, la producción de bienes intermedios disminuyó un 2,1% y la de bienes de consumo un 0,8%, mientras que la producción de bienes de capital retrocedió un 3,3%.
Fuera de la industria, la producción de energía en Alemania cayó en abril un 1,1%, mientras que la actividad en el sector de la construcción aumentó un 0,2%.
El Banco Central recorta el crecimiento
El Bundesbank, el Banco Central de Alemania, ha recortado drásticamente su previsión de crecimiento para la economía de Alemania en 2019: se moderará al 0,6%, frente al 1,6% anticipado el pasado mes de diciembre, como consecuencia de las dificultades que atraviesa el sector industrial a raíz de la caída de la demanda externa, lo que ha provocado un frenazo en las exportaciones germanas. Asimismo, el Bundesbank ha revisado a la baja su pronóstico de crecimiento para 2020, hasta el 1,2%, frente al anterior 1,6%, mientras que para 2021 anticipa un ritmo de expansión del 1,3%.
El Banco Central germano ha explicado este cambio en sus previsiones de crecimiento debido al "marcado enfriamiento" experimentado por la economía tras la anterior fase de crecimiento y ha subrayado que la principal razón es la desaceleración de la industria, "donde la mediocre evolución de las exportaciones están cobrando un peaje", mientras que las fuerzas que impulsan la economía doméstica permanecen intactas.
No obstante, la entidad confía en que las exportaciones comiencen a repuntar gradualmente a partir de la segunda mitad de 2019 y en adelante, por lo que "una vez que esto suceda, la producción industrial también debería aumentar nuevamente".
"Tal como están las cosas actualmente, los riesgos a la baja predominan para el crecimiento económico y, en menor medida, para la inflación", subrayó el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, quien expresó su confianza en que "una vez que la demanda externa se recupere, el crecimiento económico alemán tendrá una base más amplia nuevamente".
Baja en las exportaciones
Alemania tampoco puede mostrar números positivos en lo que respecta a las exportaciones. El Estado gobernado por la conservadora Angela Merkel desde hace 14 años registró 109.700 millones de euros el pasado abril, una cifra que representa un retroceso del 3,7% respecto del mes anterior y que se trata del mayor desplome desde agosto de 2015, mientras que en comparación con el mismo mes del año pasado el descenso fue del 0,5%.
Por su parte, las importaciones germanas sumaron en abril un total de 91.700 millones de euros, un 1,3% menos que en marzo, pero un 2,1% por encima de la cifra registrada en abril de 2018. De este modo, el superávit comercial de Alemania alcanzó en abril los 17.900 millones de euros, aunque en datos ajustados estacionalmente el saldo positivo fue quedó rebajado a los 17.000 millones.
En el mes de abril, las exportaciones alemanas a los países de la Unión Europea alcanzaron los 63.800 millones de euros, un 3,5% menos que el año pasado, incluyendo 41.600 millones en ventas a sus socios de la zona euro, un 0,5% menos que en abril de 2018, mientras que las exportaciones a países fuera de los Veintiocho crecieron un 4%, hasta los 47.800 millones.
En cuanto a las importaciones, las compras alemanas a los países de la UE sumaron en abril 53.100 millones, un 1,9% más en términos interanuales, incluyendo un incremento del 2,5% de las importaciones procedentes de la zona euro, hasta 34.800 millones. Por su parte, las compras de Alemania a países ajenos a la UE aumentaron un 2,4%, hasta los 38.600 millones.
De este modo, en los cuatro primeros meses de 2019 las exportaciones alemanas crecieron un 1,8%, hasta 445.800 millones, mientras que las importaciones sumaron 372.800 millones de euros, un 4,2% más.