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Política comunitaria

La fragmentación de la Eurocámara complica la batalla por liderar la UE

Los próximos meses serán clave para nombrar a las cúpulas de las instituciones. Sánchez busca devolver a España un papel influyente

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es recibido por su homólogo francés, Emmanuel Macron, a su llegada al Palacio del Elíseo, este lunes.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es recibido por su homólogo francés, Emmanuel Macron, a su llegada al Palacio del Elíseo, este lunes.Getty Images

El fin del bipartidismo ha llegado también a Europa. Los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo, conocidos en la noche del domingo, arrojan una Eurocámara mucho más fragmentada en la que, por primera vez, las dos grandes familias europeas, el Partido Popular Europeo (PPE) y la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (S&D), no alcanzan juntas la mayoría absoluta. Ello les impedirá sellar la ya tradicional gran coalición que hasta el momento había hecho posible que se repartieran los principales cargos de las instituciones europeas. Esa nueva aritmética parlamentaria abre la batalla entre populares y socialistas para disputarse el liderazgo de la Unión Europea, para lo que necesitarán del respaldo de otras formaciones que han salido reforzadas en los comicios comunitarios, como son los liberales o los Verdes.

Quedan por delante unos meses claves para diseñar las nuevas cúpulas de los organismos europeos, pero las negociaciones ya han dado el pistoletazo de salida. Desde el grupo popular apuestan por conformar una mayoría amplia y estable huyendo de los ultras y de la extrema izquierda, mientras que los socialistas se disponen a intentar agrupar una mayoría progresista alternativa a los populares, quienes en la actualidad controlan las tres mayores instituciones de la UE: la Comisión, el Consejo y el Parlamento. Paralelamente, en un claro empeño por ganar mayor influencia en la UE y tras salir victorioso de los comicios, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, inició este lunes una ronda de contactos con su homólogo francés y este martes con la líder alemana, de cara a preparar el próximo Consejo Europeo, en el que los Estados miembros tendrán que preparar la andadura de la novena legislatura y postular los posibles candidatos a los distintos órganos de poder.

A pesar de haber perdido 41 escaños, el grupo de los Populares Europeos sigue siendo, con 180 diputados, la primera fuerza de la Eurocámara (formada por 751 asientos). Por esa razón, su cabeza de lista, el alemán y miembro de la CDU –la formación que lidera Angela Merkel–, Manfred Weber, afirmó en la noche electoral su intención de convertirse en el próximo presidente de la Comisión Europea (CE), un cargo para el que parte, en principio, como favorito. La tradición en la UE marca que el proceso para elegir al líder del Ejecutivo comunitario se dispute entre los principales cabezas de lista de las elecciones al Parlamento Europeo, tal y como se hizo en 2014 con Jean-Claude Juncker, si bien no se trata de un procedimiento obligatorio.

Para recabar los apoyos necesarios, Weber anunció que su intención es “crear estabilidad” en la UE, uniendo fuerzas con liberales (109 escaños) y socialistas (146) –lo que sumaría una amplia mayoría de 435 escaños–, e incluso con Los Verdes (69), con lo que se alcanzarían los 504 asientos. No obstante, recalcó su firme intención de excluir a los extremos. “No hay posibilidad de cooperación con extremistas de la derecha o de la izquierda”, sostuvo.

“Estabilidad no es la primera palabra que me viene a la cabeza al pensar en Europa” porque significa “mantener las cosas como están”, lo contrario de lo que han pedido los ciudadanos europeos, le replicó este lunes el cabeza de lista socialista y también candidato a la Comisión, Frans Timmermans. Este holandés, que en la actualidad es vicepresidente del Ejecutivo comunitario y cuya formación (PvdA) ganó los comicios europeos en su país, declaró que tratará de formar una “alianza progresista” que defienda un “programa social” en la Eurocámara que frene al grupo popular. Una mayoría, dijo, que sea capaz de “actuar frente al cambio climático, la injusticia y la necesidad de que las empresas paguen impuestos”. No obstante, la unión de socialistas (146), liberales (109), verdes (69) y la izquierda (39) englobaría a 363 escaños, a 13 de la mayoría absoluta, lo que implicaría acudir también a diputados independientes o no adscritos a ningún grupo.

En medio de este inicio de baile de sillas, Pedro Sánchez se reunió este lunes por la noche en el Elíseo con Emmanuel Macron, con la intención de encontrar en el francés una alianza para frenar a la ultraderecha en Europa y preparar la cumbre informal de esta noche en Bruselas. Determinado a que España juegue un rol mucho más influyente en las instituciones comunitarias –un papel que apenas ejerció durante los años de la crisis–, el dirigente del PSOE también mantendrá un encuentro este martes con la canciller alemana, Angela Merkel, antes de la reunión de los Veintisiete.

A diferencia de Macron –que el domingo salió castigado en las urnas y superado por la formación ultra de Marine Le Pen– y de Merkel –cuya coalición formada por la CDU-CSU y el SPD perdió casi 20 puntos–, el PSOE se erigió como uno de los grandes vencedores de los comicios europeos. Así, sus 20 escaños constituyen la primera fuerza parlamentaria del grupo socialista, en línea con los 21 de Macron, que lidera el grupo liberal, y de los 29 de la CDU de Merkel, que hace lo propio entre los populares europeos.

Próximas fechas del calendario comunitario

 

28 de mayo. Esta noche, los jefes de Gobierno mantendrán en Bruselas una cena informal para hacer un primer balance de los comicios europeos.

20 y 21 de junio. Consejo Europeo en el que, entre otros asuntos, los Veintisiete propondrán al candidato a presidir la Comisión Europea (CE).

24 de junio. Último día para notificar al Parlamento Europeo los nuevos grupos que conformarán la Eurocámara. En la actualidad existen ocho, entre ellos, el PPE y el S&D. 

2 al 4 de julio. Sesión constitutiva de la Eurocámara en la que se elegirá por mayoría absoluta y voto secreto a su nuevo presidente, que sucederá a Antonio Tajani.

15 al 18 de julio. Segunda sesión plenaria en la que se nombrará al nuevo presidente de la CE, sucesor de Jean-Claude Juncker. Un rechazo de la Cámara alargaría el nombramiento hasta después de verano. 

31 de octubre. Fecha tope de salida de Reino Unido de la UE. Ese día también expira el mandato de Mario Draghi al frente del Banco Central Europeo. 

1 de noviembre. Si se cumplen todos los plazos, la CE podría constituirse ese día, mientras que el presidente del Consejo tomaría posesión del cargo el 1 de diciembre.

 

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