Los nuevos dueños mexicanos del Villa Magna barajan dar entrada a una marca internacional en el hotel
RLH Properties apuesta por invertir en el mercado inmobiliario del lujo en España Su accionista, BK Partners, ya controla activos por 2.500 millones
La inmobiliaria RLH Properties acaba de adquirir el hotel Villa Magna de Madrid, uno de los referentes del segmento de lujo en la ciudad, por 210 millones de euros. Los responsables de esta empresa mexicana explican en un encuentro con Cinco Días los planes para este establecimiento y sobre sus inversiones en España.
La inmobiliaria, cotizada en la Bolsa de México, es uno de los vehículos de inversión de la gestora BK Partners, con sede en Madrid. Esta firma cuenta como socios con los mexicanos Allen Sanginés Krause y los hermanos Jerónimo y Juan Bremer y el español Borja Escalada. “Nuestro enfoque es México y España. Hasta ahora tenemos invertido en activos alrededor de 2.500 millones de dólares [2.200 millones de euros]. Esta es la primera inversión grande en España”, afirma Sanginés.
El Villa Magna, de cinco estrellas e inaugurado en 1972, fue tradicionalmente operado por Hyatt. Los directivos de la inmobiliaria reconocen que actualmente están estudiando la posibilidad de asociarse con una enseña internacional del lujo. “Obviamente vemos más potencial en el hotel y estamos analizando todas las opciones. Es una alternativa, no es imposible. Conocemos a las grandes marcas, con las que ya trabajamos. Sabemos lo que pueden aportar desde el punto de vista internacional. Eso claramente puede aportar aún más crecimiento”, apunta Jerónimo Bremer, uno de los socios de BK Partners.
Aunque recuerdan el potencial del propio hotel madrileño. “La marca de Villa Magna tiene mucho valor no solo en España, sino en Latinoamérica”, asegura Sanginés Krause, quien fuera responsable de Goldman Sachs en España.
RLH Properties ha adquirido el hotel al holding turco Dogus, que hace dos años había pagado 180 millones. El desembolso actual es un récord en este sector, pagando 1,4 millones por cada una de las 150 habitaciones del Villa Magna. “El ratio que nosotros analizamos es más bien la generación de caja del hotel y su potencial, más que el precio por habitación. Con eso hemos calculado el precio. Desde que Dogus compró el hotel ha tenido un gran recorrido, incluso nos sorprendió”, señala Bremer. “El precio no viene por un alza en el mercado inmobiliario, sino por el flujo de caja. Los hoteles son muy sensibles a las tarifas y a la ocupación”, añade.
“Tenemos siempre una orientación a muy largo plazo. No nos enfocamos en el pelotazo”, afirma Allen Sanginés Krause
Esta compra es la primera gran adquisición de BK Partners en España, tras sendos proyectos residenciales más pequeños en Madrid y San Sebastián. “Tenemos siempre una orientación a muy largo plazo. No nos enfocamos en el pelotazo”, afirma Sanginés.
“Seguimos analizando más oportunidades. Nuestra estrategia es enfocarnos en el segmento de lujo en activos únicos en ubicaciones privilegiadas, que creemos que a largo plazo tienen una muy buena rentabilidad en un mercado creciente”, opina Bremer. La inmobiliaria quiere centrarse en Madrid, Barcelona, Marbella y Baleares.
Creen que el mercado del lujo todavía está por explotar. “España es una gran potencia turística. Vemos quetiene aún mucho más crecimiento en el segmento del lujo, especialmente en Madrid. La ciudad se ha convertido en un atractivo turístico con grandes proyectos que vienen a ayudar a crecer ese segmento como son el Four Seasons de Canalejas o el Ritz de Mandarin Oriental”, incide Bremer.
BK Partners invierte a través de cuatro vehículos especializados en desarrollos de suelo, energías renovables, residencial (en menor medida) y el hotelero de RLH Properties. Esta inmobiliaria anteriormente ha adquirido el Four Seasons de la Ciudad de México y los desarrollos hoteleros de OHL en Mayacobá (México), con enseñas como Fairmont y Rosewood. “RLH es una compañía enfocada en activos hoteleros y residenciales asociados a las marcas hoteleras en el segmento del lujo y del ultralujo. Tenemos un equipo que gestiona cada hotel en asociación siempre con marcas de reconocido prestigio”, aclara Escalada.
Precisamente, por la la experiencia previa creen que puede servir para la gestión del Villa Magna, en aspectos como una mayor inversión en el restaurante y bar para convertirlo en un sitio de obligada visita de la capital. “Four Seasons en la Ciudad de México es un buen comparable de experiencia con nuestra idea para el Villa Magna”, remarca Escalada. “Ahí tenemos una ventaja competitiva”, coincide Sanginés.
El perfil de BK
Inversores. “La filosofía es poner dinero nuestro cada vez que iniciamos un vehículo, pero siempre trayendo capital institucional a acompañarnos. La enorme mayoría del capital que tenemos es institucional, como fondos de pensiones, recursos del Fondo Nacional de Infraestructuras de México, socios como el Banco Japonés de Cooperación Internacional y el Banco Interamericano de Desarrollo”, detalla Sanginés.
Estilo. “Estamos enfocados al largo plazo. Somos conservadores en la forma y profundidad para analizar las operaciones. Somos muy prudentes en el nivel de endeudamiento y tratamos de tener accionistas que nos acompañen con ese perfil”, añade.