Radiografía de los mayores: dueños de su piso, buena salud y con pensión digna
El 88% defiende la necesidad de revalorizar las pensiones de acuerdo al IPC Cuatro de cada diez tiene que ayudar económicamente a sus hijos o nietos
El Instituto BBVA de Pensiones ha realizado una extensa encuesta preguntando a 3.000 personas jubiladas o cercanas a la edad de jubilación. Contra la creencia general, la mayoría considera que está cobrando un pensión aceptable. Solo el 27% del total considera que su pensión es mala o muy mala. "Estos datos demuestran que los mayores no consideran de forma mayoritaria que sus pensiones no sean dignas", explica Elisa Chuliá, profesora universitaria, miembro del foro de expertos ligado al Instituto BBVA de Pensiones y directora del estudio.
Esta especialista en pensiones destaca que hay grandes diferencias según el tipo de pensión cobrada. Así, quienes cobran pensiones de viudedad y las no contributivas (más bajas que las de jubilación e invalidez) sí que consideran en mayor proporción que están percibiendo unas pensiones bajas. "Además, como este tipo de pensiones las cobran mayoritariamente mujeres, se puede decir que entre ellas hay un mayor grado de disconformidad que entre los hombres", apunta Chuliá.
El estudio también revela que el 92% de los mayores de 60 años es propietario de una vivienda. Solo el 5,6% de los mayores vive de alquiler, y pagan de media 412 euros. Precisamente tener un inmueble en propiedad es uno de los factores más diferenciales de la situación de los jubilados españoles frente a los de otros países europeos, donde la tasa de alquiler es muy superior.
Nivel de ingresos
Respecto a los ingresos, el 42% dispone de más de 1.500 euros mensuales de rentas en el hogar y solo el 3% ingresa menos de 600 euros al mes. De acuerdo con la encuesta el 99% de los mayores de 60 años puede pagar los gastos relacionados con su vivienda principal, el 77% puede permitirse mantener su vivienda con temperatura adecuada y el 68% disfrutar de actividades de ocio.
"Estos datos, similares a los que obtiene el Instituto Nacional de Estadística, revelan que la vulnerabilidad de los mayores es significativamente menor a la que presentan otros grupos de edad", explica Chuliá.
El estudio también pone de manifiesto hasta qué punto los ingresos de los mayores se han convertido en imprescindibles para ayudas a sus hijos y nietos. Según la encuesta, el 37% de los mayores ha ayudado económicamente a sus descendientes. De media dan más de 330 euros al mes para hijos o nietos.
El Instituto de Pensiones también ha preguntado por la capacidad de ahorro, y el 42% de los mayores sí que puede apartar una parte de sus ingresos para gastos futuros o para dejar una mayor herencia. El dinero suele mantenerse en depósitos y cuentas de ahorro.
En cuanto a la salud, el 55% de las personas mayores de 60 considera que su estado es bueno o muy bueno, y solo el 10% dice encontrarse mal o muy mal. De hecho, preguntados sobre a partir de qué edad empiezan a considerarse a sí mismo como "mayores", los hombres dicen que a los 71 años y las mujeres a los 74 años.
De este colectivo, el 86% no recibe ningún servicio social, mientras que el 10% tiene dispositivos de teleasistencia y el 5% ayuda a domicilio.
La encuesta también pregunta sobre la sostenibilidad del sistema público de pensiones. El 59% está convencido de que su pensión está garantizada y que va a seguir cobrándola toda su vida, mientras que el 35% no lo cree.
Una de las respuestas más uniformes es la referida a la necesidad de revalorizar cada año las pensiones para que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo. El 88% se muestra favorable.
"Lo que sí que se observa es una cierta incoherencia de cara a las pensiones futuras porque el 87% está preocupado por las pensiones de los más jóvenes y creen que serán inferiores a las actuales, pero la mayoría no aceptaría reducir su pensión actual para garantizar las pensiones futuras", explica Chuliá.
El estudio también revela que el 60% cree que van a cobrar lo mismo o menos de lo cotizado a lo largo de su vida laboral. Sin embargo, los datos demuestran que cada pensionista recibe casi un 50% más de lo que ha cotizado.