Los grandes inversores solo apuestan 1.700 millones en el Ibex durante su caída
Repsol, Bankia, Sabadell, Amadeus e IAG acaparan las adquisiciones Consejeros y directivos se hacen con títulos por unos cuatro millones
Los grandes inversores no se han puesto los trajes de cazagangas. El pasado 11 de mayo, el Ibex cerró en 10.271 puntos, y desde entonces no ha dejado de caer, con altibajos que lo llevaron a tocar los 9.465 el día 31 de ese mes. El miedo a una guerra comercial entre Estados Unidos y el resto del planeta se colocó en máximos históricos.
La Bolsa española ha estado prácticamente paralizada en los últimos tiempos. Un paso hacia adelante y otro hacia atrás con una volatilidad por los suelos. Las gestoras de fama internacional que suelen reforzarse en las compañías con las caídas han comprado, sí. Pero poco, muy poco.
Los BlackRock (con 5,4 billones de euros bajo gestión), Vanguard (4,4 billones) o Capital Group (más de 1,7) de turno han estado relativamente quietos. Tampoco el fondo soberano de Noruega, Norges Bank, que tiene predilección por el mercado español y cuenta con una munición de casi 900.000 millones de euros, ha estado especialmente activo en la renta variable nacional.
Las operaciones de compraventa de grandes inversores comunicadas a la CNMV desde el 11 de mayo arrojan un saldo positivo de más de 1.700 millones de euros a precios de mercado en títulos de empresas que forman parte del Ibex. El cálculo es en términos netos: valor de las acciones adquiridas menos el de las vendidas. En contexto, la realidad es que es muy poco dinero. La capitalización de las compañías del selectivo supera actualmente los 600.000 millones. Lo invertido apenas supone un 0,3% del total.
La confianza de los directivos
Compras. Consejeros, en algunos casos también directivos, de empresas del Ibex han comprado títulos por unos cuatro millones desde el 11 de mayo. Lo han hecho en Acciona, ACS, Cellnex, Indra, Sabadell, Indra y Amadeus. Entre los compradores destacados están los consejeros delegados de ACS y Cellnex, Marcelino Fernández Verdes, y Tobías Martínez, respectivamente, con acciones valoradas ahora en unos 600.000 euros cada uno.
Fuentes del mercado indican que la situación está delicada. No es momento para comprar un valor, por muy interesante que sea, porque se produzcan correcciones. El contexto importa en extremo. De fondo están las tensiones comerciales, políticas y los miedos a una ralentización del crecimiento económico y un alza de los tipos de interés.
Por supuesto, pueden haberse producido operaciones de tamaño más reducido, pues solo es obligatorio comunicar las participaciones que superen el 3% del capital de una compañía. El porcentaje se reduce al 1% en caso de que el comprador tenga su sede en un paraíso fiscal.
Las adquisiciones han sido mínimas desde que el Ibex marcó los máximos de mayo cerca de los 10.300 puntos
Las firmas en las que más dinero ha entrado son Repsol, Bankia, Banco Sabadell, Amadeus e IAG, con más de 2.100 millones entre las cinco (véase gráfico). En este importe es crucial la aportación de Bank of America, que ha revelado una participación en Repsol del 5,359% por más de 1.400 millones. El banco explica que opera con los títulos en cartera de negociación y que por eso se acogió a la excepción que recoge la Ley del Mercado de Valores de no informar pese a que había alcanzado antes el 3% de la petrolera. La entidad no puntualiza si tiene ese porcentaje por cuenta propia o pertenece a sus clientes.
Además de esas cinco compañías también han sido diana de las compras CaixaBank, Iberdrola y Ferrovial. La inversión total, en todo caso, en estas firmas es mínima en comparación con su capitalización: unos 26 millones de euros, frente a un valor bursátil conjunto de alrededor de 26.000.
El balance de los movimientos comunicados al supervisor es positivo, pero también ha habido ventas de tamaño considerable en un puñado de empresas del Ibex. El importe de las desinversiones comunicadas por parte de Norges Bank, BlackRock y Lansdowne Partners en Dia, Repsol –la petrolera aparece en la lista de las compras y en la de las ventas–, IAG, Telefónica y Santander suma más de 400 millones de euros.