Barreras de la pyme al exportar y soluciones para superarlas
El auge de las exportaciones genera fórmulas de negocio basadas en solventar los problemas que enfrentará una pyme en su salida al exterior.
Entre 2009 y 2016 las exportaciones han crecido en España un 50%. Especialmente durante los años más duros de crisis, exportar ha sido una salida interesante para muchas corporaciones, que encontraron en la venta exterior la facturación que desaparecía en el mercado local español.
Pero, para lograrlo, es necesario superar una serie de barreras que pueden resultar complejas. Ciertas empresas han creado modelos de negocio basados en ofrecer ayuda para superar barreras como el idioma, los cambios de moneda o la logística. Analizamos a continuación los principales problemas y qué soluciones tecnológicas existen para solventarlos.
La logística, el gran eje de una internacionalización
Si una pyme quiere vender en el exterior, necesitará ser ágil a nivel logístico. El avance del comercio electrónico ha generado unas estrictas políticas de entrega. Es difícil competir si no se logran envíos rápidos y prácticamente gratuitos para los clientes.
En este sentido, existen dos soluciones que permiten comparar tarifas y plazos de entrega en apenas unos clics. Un apoyo fundamental, especialmente en los inicios de actividad exterior. iContainers, por ejemplo, compara precios de envío, características y fechas de salida en el sector marítimo. OnTruck ofrece información similar en el ámbito regional, puesto que en ocasiones puede ser necesario movilizar mercanciás en España para una posterior salida al exterior.
La moneda
El tipo de cambio y las transacciones en diferentes países pueden generarnos problemas fiscales y de tesorería. Dificultades que pueden ser muy graves, si los niveles de facturación comienzan a ser elevados en países con diferente moneda. Las diversas cotizaciones en los mercados, la política de pagos de los países, y los márgenes en un hipotético cambio de divisa, generan márgenes que pueden limitar nuestro beneficio, y nos impidan calcular con claridad cuál debe ser el precio de comercialización de nuestros producto para que sean operaciones rentables.
La empresa española Ebury, se encarga de simplificar este tipo de transacciones, al permitir la realización de pagos en 140 monedas distintas. Actualmente presta servicio a 24.000 pymes europeas, 3.500 de las cuales tienen sede en España.
Marketplaces
El uso de marketplaces como Amazon, Alibaba o eBay pueden servir de apoyo a la hora de testear nuestros precios, productos y soluciones. A pesar de que el margen de beneficios será menor que una venta directa, son canales generadores de ventas, gracias a un buen posicionamiento en buscadores y otras técnicas de marketing online. Sin embargo, existen nichos de mercado en los que es necesario alejarse de estos grandes portales. Si, por ejemplo, nos dedicamos a la venta de productos textiles, podemos acceder a Dewanda, un marketplaces especializado en este sector. Algo similar ocurre con Etsy, especializado en productos artesanales.
Estos nos permitirán testear los productos en un ámbito especializado. Además de generar un impacto en público realmente target.
El problema del idioma
La empresa Waverly Labs plantea una tecnológica solución a este problema, a través del lanzamiento de un kit de traducción automática llamado Pilot. Este elemento se coloca en la oreja de los interlocutores, y traduce en tiempo real las conversaiones, por medio de auriculares y micrófono. En la actualidad, el sistema funciona con cinco idiomas, y facilita enormemente el entendimiento en reuniones de negocio.