¿Qué necesita el dólar para recuperar la fortaleza? Los inversores miran a la Fed
El mercado espera que se concrete el inicio de la reducción del balance de deuda La probabilidad de subida tipos en diciembre se limita al 50%
Los inversores prefieren no jugársela y hasta que no se conozca el veredicto de la Reserva Federal el próximo miércoles con las Bolsas europeas ya cerradas, la calma será la tendencia dominante en los mercados. Con el euro en los 1,19 billetes verdes, el consenso de los analistas afirma que el mercado no está poniendo en precio la tercera subida de tipos de Estados Unidos, un alza de la que se ha llegado a dudar en los últimos meses ante los débiles datos de inflación. Si finalmente se cumplen los planes de la institución, el incremento del precio del dinero se produciría en diciembre.
No obstante, la probabilidad que le otorgan los futuros de los fondos federales sigue siendo baja y se limita al 50% para diciembre de este año y al 60% en el caso de que el aumento de las tasas se produzca antes de finales de 2018. Es decir, como defiende Franck Dixmier, director global de renta fija de Allianz Global Investor, existe una brecha entre las expectativas del mercado y la orientación de la Fed. Según el gráfico de puntos del banco central estadounidense, el 70% de los miembros del Comité Mercado Abierto (FOMC) espera un repunte de 25 puntos básicos antes de que concluya 2017 y el 80% cree que los tipos deberían subir más antes de que termine 2018.
Esta divergencia entre lo que prevén los expertos y lo que auguran desde la institución se debe a un conjunto de factores como la ausencia de subidas en los salarios, las dudas sobre la capacidad de Donald Trump de aplicar las reformas económicas, los daños causados por el huracán Harvey y la dimisión del vicepresidente de la Fed, Stanley Fischer.
Descartada la subida de los tipos, los expertos esperan conocer cuándo comenzará la reducción del balance de la Fed. Al menos que se concrete cuándo la institución dejará de reinvertir los vencimientos de la deuda porque el esquema ya fue detallado en meses anteriores. Marian Fernández, responsable macro de Andbank España, señala que donde existe consenso pleno es en la necesidad de dejar de reinvertir los vencimientos. En un principio la reducción sería de 6.000 millones de dólares en bonos estadounidenses al mes y 4.000 millones en activos respaldados por hipotecas (MBS). Estos importes se incrementarían trimestralmente hasta los 30.000 millones de dólares en treasuries y 20.000 millones de dólares en MBS.
De acometerse este movimiento, Víctor Peiro, director general de análisis de GVC Gaesco Beka, no espera un fuerte impacto en el mercado porque con un PIB mundial creciendo al 3,5% la liquidez seguirá muy abundante.
Uno de los activos que más podrían sentir el impacto de las medidas de la Fed será el dólar. Desde GVC Gaesco creen que si el mensaje de la Fed sigue apuntando a una subida de los tipos a finales de año, el euro podría corregir hasta los 1,15 dólares.
En la misma línea se mueve Eugeni Siscar, analista de BNP Paribas Personal Investors, que establecen como horquilla los 1,15-1,17 dólares.Asimismo, apuntan que el bono estadounidense a diez años, muy dependiente de los datos de inflación, actualmente en el 2,2%, podría cerrar en el año entre el 2,35% y 2,5% si el tono de la Fed se vuelve más agresivo en lo que a lo normalización monetaria se refiere. Peiro cree, no obstante, que la influencia de las decisiones de este mes serán muy limitas en la renta fija, limitándose a alguna pequeña corrección en la deuda de alto riesgo.
Desde Andbank, las previsiones de euro dólar para el cierre de 2017 continúan en los 1,05 billetes verdes a la espera de futuras reuniones de los consejos de análisis de la firma. Para que estas previsiones se hagan realidad serían necesarios dos ingredientes. El primero de ellos pasa porque las reformas de Trump dejen de ser promesa y empiecen a aplicarse para contribuir al crecimiento económico y por otro, que los mensaje de la Fed confirmen un endurecimiento de la política monetaria en línea con lo anunciado a comienzos de año.
Menor influencia tendrá en la renta variable. Desde BNP Paribas Personal Investors sostienen que los máximos de los últimos tiempos se corresponden con los buenos datos macro. A lo que desde GVC Gaesco Beka añaden la mejora de los resultados empresariales que se situó entre el 8-10% en el último trimestre. "Si bien de cara al medio largo plazo nuestro escenario se mantiene positivo para la Bolsa, no debemos descartar un algún episodio de repunte de la volatilidad ante posibles incrementos en las incertidumbres geopolíticas", indican desde BNP.