El desafío de ampliar las coberturas del multirriesgo
La póliza más común entre los comercios no siempre es la más completa Las aseguradoras lanzan productos específicos para este colectivo
Las compañías de seguros están adecuando su oferta por sectores para captar nuevos clientes entre las pequeñas empresas y convencer a las que ya lo son de ampliar sus coberturas. Pero, incluso entre estas últimas, la tarea es ardua, porque la mayoría se conforma con protegerse de los riesgos más elementales u obligatorios para su actividad, como robos e incendios, y asume todos los demás.
Dada la gran variedad de seguros existentes en el mercado, es difícil de estimar la proporción de pymes que tienen contratado este producto. Sin embargo, las cifras del multirriesgo, uno de los más comunes entre los pequeños comercios, pueden dar una aproximación.
Según la asociación de aseguradoras Unespa, en 2014, bares, restaurantes, tiendas de alimentación, talleres y pequeñas industrias contrataron 1,7 millones de pólizas de multirriesgo. Si este dato se cruza con las 3,2 millones de empresas con menos de 500 trabajadores que operan en España, se deduce que el 54% de las pymes tiene al menos un seguro contra daños patrimoniales.
Otra cosa es el número y alcance de las coberturas incluidas en esas pólizas, ya que estas se ajustan a los requerimientos de cada cliente y varían mucho de un producto a otro. Por ejemplo, un autónomo que no tiene taller o local comercial porque trabaja en la vivienda o empresa de sus clientes no necesita protegerse contra robos o incendios. En su caso, será más importante contar con un seguro de responsabilidad civil.
De acuerdo con un estudio de Mapfre, un tercio de las necesidades aseguradoras de las empresas no están debidamente cubiertas. Entre las contingencias con menor grado de protección figuran la responsabilidad civil de administradores y directivos en caso de que su empresa cometa alguna infracción o delito, las pérdidas de ventas o beneficios por la paralización de la actividad comercial o industrial, las averías en maquinaria y ordenadores, y el transporte de mercancías.
“Los clientes creen que tienen un seguro completo, cuando en realidad es bastante básico”, confirma Agustí Pascual, director del negocio de pymes de Zurich en España. “Hay gastos en los que deben incurrir en caso de incendio y que no tienen cubiertos. Por ejemplo, el alquiler de otro local mientras reforman el afectado por el siniestro, o la reparación o cambio de maquinaria averiada. Son riesgos que corren y podrían transferir a la aseguradora”, explica.
A menudo, las pymes se resisten a ampliar sus coberturas por temor a que se dispare la prima, pero Pascual asegura que es una creencia errónea. “El impacto de subir el límite asegurado por responsabilidad civil de 200.000 a 600.000 euros es de 30 euros al año”, señala. El precio medio de un multirriesgo para el sector comercio es de 500 euros al año y para la industria, de 2.000.
La prima media para el comercio es de 500 euros al año y para la industria, de 2.000
El ejecutivo sostiene que la contratación de coberturas adicionales es una necesidad creciente ahora que los jueces están tomando como referencia para el cálculo de las indemnizaciones el nuevo baremo de daños por accidentes de tráfico, que entró en vigor en enero de 2016 con cuantías más altas.
Conscientes de que el 46% de los pequeños negocios no tiene ninguna cobertura, las aseguradoras están diseñando productos específicos para este colectivo. “Las pymes requieren servicios con un alto nivel de especialización”, dice Jaime de Argüelles, subdirector general de Allianz Seguros, cuyo multirriesgo da la posibilidad al empresario de decidir el grado de protección que desea para su patrimonio, desde una simple cobertura contra incendios hasta la sofisticada todo riesgo.
Axa ha lanzado un seguro específico para startups que incluye coberturas frente a reclamaciones o sanciones por incumplimientos de la ley de protección de datos y responsabilidad civil por ataques de virus informáticos. “La información de un cliente o proveedor mal tratada puede originar una reclamación que no se pueda afrontar y acabe con el negocio”, afirma Kristof Vanooteghem, director de empresas de Axa.
Nationale-Nederlanden ha diseñado Contigo Pyme, un seguro colectivo de vida y accidentes para empleados. Además, las empresas de hasta 100 trabajadores que contraten este producto antes del 30 de junio se beneficiarán de un descuento.
Por último, Juan Ignacio Richart, director de productos diversos de Liberty Seguros, recuerda la importancia del bróker para este segmento: “El 86% de las pymes prefiere contratar a través de un mediador especializado, ya que valoran mucho la atención de persona a persona”.
Ajenas a los ciberataques
A pesar de que todas las compañías, independientemente de su tamaño, están expuestas a ataques informáticos, el seguro contra riesgos cibernéticos es uno de los que más cuesta vender a las pymes.
“Se tiende a pensar que las grandes empresas son las únicas víctimas de estos ataques, cuando estudios recientes demuestran el elevado grado de vulnerabilidad de las pymes, debido a una menor inversión en la seguridad de sus infraestructuras digitales”, comenta Jaime de Argüelles, de Allianz.
En efecto, según un estudio de Mapfre, las pequeñas empresas sufrieron el 70% de los más de 100.000 ciberataques que se registraron en España el año pasado. Ante esta evidencia, el grupo ha lanzado su seguro de ciberriesgos para pymes y autónomos, a los que un delito de esta naturaleza acarrea un gasto de entre 20.000 y 50.000 euros.
Axa, por su parte, dispone para este colectivo de Ciber Protección, que ofrece asesoramiento informático y contempla la posibilidad de incluir garantías opcionales, como lucro cesante o una gestión de crisis.
En cuanto a los seguros medioambientales, Agustí Pascual, de Zurich, explica que fuera de los sectores para los que son obligatorios, resulta también muy difícil de incluir en las pólizas de las pymes, a pesar de que son riesgos a los que están expuestas.
En automóviles, MM Globalis, compañía de Mutua Madrileña, informa de que el seguro de este ramo más demandado por los pequeños negocios es el de autos a terceros, pero ampliado con coberturas como rotura de lunas, incendio o robo, tendencia que se ha visto favorecida por el aumento de las matriculaciones.