Neil Livingstone: “Los fondos inmobilarios tienen 50.000 millones para España”
El responsable de la consultora internacional explica que los vehículos de inversión han puesto su mirada en el inmobiliario español.
Escocés de nacimiento y de ascendencia chilena, Neil Livingstone encabezó el desembarco de la consultora inmobiliaria Colliers International en España hace una década. Desde entonces, esta firma se ha convertido en uno de los referentes del sector. “Somos fuertes en operaciones fuera de mercado y en buscar oportunidades a través de iniciativas propias. Por ejemplo tenemos una estrategia a largo plazo, de transacciones que sabemos que van a llevar varios años hasta que se culminen porque son complejas y requieren una negociación por problemas urbanísticos, legales o porque afecta a varias partes en litigio”, explica Livingstone, director general de Colliers, que comparte el cargo con su socio Antonio Pan de Soraluce.
En los dos últimos años, el mercado inmobiliario terciario (oficinas, hoteles, centros comerciales, logística...) ha vivido unos niveles récord de inversión, entre 10.000 y 13.000 millones el pasado año, según las fuentes, y sin contar las operaciones corporativas. Detrás de ese impulso han estado las nuevas socimis y los fondos internacionales que buscaban comprar barato apostando por la recuperación en España. Además de las nuevas promotoras residenciales como Neinor Homes, Aedas o Dospuntos respaldadas por el capital internacional. Y desde Colliers se cree que, de momento, seguirá el ritmo.
De hecho, la consultora ha realizado sus propios cálculos con el sondeo de clientes y vehículos de inversión habituales en el sector. “Los fondos tienen más de 50.000 millones de capital dispuestos para invertir en el sector inmobiliario español”, asegura Livingstone. La baja rentabilidad en otros productos alternativos y la confianza en la recuperación de España hace que la enorme liquidez que hay en el mercado busque las oportunidades aquí, por delante de otros entornos. “Es cierto que no todos van a poder invertir y en dos o tres años tendrán que cambiar su foco. O si no encuentran oportunidades lo harán en otros países”, afirma.
Precisamente este experto, que anteriormente trabajó en las consultoras CBRE y Aguirre Newman, señala que para los inversores el mayor problema es la falta de producto de calidad y a la venta. “Los inversores ven en España un panorama político estable. Solo hay dudas respecto al euro y a la situación europea en su conjunto”, asevera el responsable de la multinacional canadiense en España.
A la inversión extranjera, apunta, le interesa todo tipo de activos en España, desde los más tradicionales edificios de oficinas, centros comerciales y hoteles, a otros como centros para la tercera edad y residencias de estudiantes.
“Los fondos también entraron con una expectativa de recuperación en el crecimiento en las rentas (alquileres) y aún no la hemos visto”, opina. “Sí hay expectativa de crecimiento, pero el mercado de oficinas está obsoleto y ha cambiado también por las diferentes formas de trabajar con conceptos abiertos, el teletrabajo o la rotación en los puestos físicos. Las empresas necesitan ahora menos espacio y más eficiente”, aclara.
Apunta que el elevado ritmo de adquisiciones obedece también en parte a que algunos de los inmuebles han retrasado su salida al mercado esperando mejores condiciones. “Veremos que en algún momento ese nivel de inversión bajará”, opina.
Livingstone también ve crucial el papel de las grandes socimis, que el año pasado, por ejemplo, casi alcanzaron los 2.000 millones en inversiones, sin contar la integración de los activos de Metrovacesa en Merlin Properties. “Las socimis van a seguir muy activas, con un ritmo parecido de inversiones”, apunta. Es el caso, por ejemplo, de Axiare, que en las últimas semanas ha invertido más de 300 millones en diferentes compras. Con la socimi Lar España esta firma ha asesorado en el desarrollo de Lagasca 99 en Madrid, una promoción de viviendas de lujo que probablemente se situarán entre los precios más caros de España. Además, de participar en la búsqueda de un socio para OHL en el futuro complejo de Canalejas.
“Queremos duplicar la facturación en 2020”
Colliers International es una consultora inmobiliaria internacional con origen en 1998 en Vancouver (Canadá). Cotizada en el Nasdaq, emplea a 16.000 personas en 66 países. En 2015 obtuvo unos ingresos de 1.700 millones de dólares a nivel global. En España comenzó a operar en 2006, con la incorporación de Neil Livingstone y Antonio Pan de Soraluce procedentes de Aguirre Newman.
La apuesta de esta firma es la de crecer en España acompasada a la recuperación del mercado inmobiliario. “Tenemos objetivos de un crecimiento muy grande. Queremos duplicar la facturación en España en 2020”, asegura Livingstone. El pasado año, con las cuentas aún no cerradas, sus ingresos se acercaron a los 25 millones de euros.
“Para llegar a esos objetivos, estamos fichando gente muy senior”, explica como estrategia de la compañía. Este directivo ha participado en los últimos años en la venta de la sede de Facebook en Londres o en el portfolio de deuda de Abacus traspasado a Deutsche Bank. La firma está haciendo especial hincapié en reforzarse en el área de mercado de capitales. Por eso, acaba de fichar al francés Anthony Labadie como director sénior en el departamento de capital markets. Labadie cuenta con una amplia experiencia a nivel internacional, en los últimos años, por ejemplo, con la apertura de la oficina en Turquía de CBRE. Con esta incorporación esperan avanzar en operaciones en segmentos de oficinas, retail, residencial, centros comerciales e industrial y logístico.