Diez trucos y consejos para evitar robos en mi tienda
Cámaras ficticias, avisadores de presencia o ubicación estratégica de espejos son algunas de las acciones que te ayudarán a prevenir robos
Los robos, atracos y hurtos son las mayores preocupaciones de los autónomos y dueños de pequeños negocios. Al cabo del año supone la pérdida de importantes cantidades de dinero. Sin embargo, todo esto se podría evitar o reducir si se toman las pertinentes precauciones. Te daremos 10 claves para no ser víctima de robos o atracos en tu establecimiento.
- Estar en alerta ante la presencia de cualquier persona sospechosa. La actitud que muestre puede resultar esencial. Los amigos de lo ajeno tienen una peculiar manera de comportarse.
- Todas las ventanas y cerraduras de las puertas deben ser de alta resistencia, sobre todo si nuestro establecimiento es una relojería o cuenta con objetos de mucho valor.
- En el local sólo conservaremos una cantidad mínima de dinero en efectivo. A medida que se vaya acumulando lo guardaremos en una entidad financiera o en la caja fuerte. Es preciso, además, que no establezca una hora o ruta habitual para realizar los depósitos en el banco.
- Instale un sistema de alarma y con una cierta frecuencia compruebe que funciona con normalidad. Intentaremos anunciar a los posibles ladrones los distintos sistemas de seguridad que tenemos en la tienda.
- No dificulte nunca la visibilidad en el interior del local colocando demasiados elementos en las vidrieras.
- Coloque un circuito cerrado de televisión con el propósito de presentar unas pruebas ante la policía en caso de hurto.
- Tanto dentro como fuera de la tienda debe haber una luz adecuada. La oscuridad es un perfecto aliado para los ladrones, que podrán trabajar con más comodidad.
- Pon en la puerta del local un dispositivo que haga algún tipo de sonido, que te permita estar en todo momento atento a las entradas a la tienda. El presunto ladrón sabrá que el propietario conoce que alguien ha entrado en el establecimiento y que estará vigilante.
- Coloca espejos que no alteren la estética de la tienda y que te ayuden a observar los rincones de difícil acceso. Así conseguirás vigilar a los clientes sin que se sientan presionados al tiempo que visualizan los productos.
- Cámaras ficticias, que en realidad ni graban. A veces basta con poner un simple cartel con su presencia para ahuyentar a los amigos de lo ajeno.
Las nuevas tecnologías también han llegado a los pequeños negocios, como demuestra Evolve Store, una app para dispositivos móviles que permitirá evitar los robos en los establecimientos en tiempo real.