El mercado, el freno más rápido a Google
Tras cinco años de tanteo, la Comisaria Margrethe Vestager se inclina a culpar al gigante de las búsquedas de abusos por monopolio, según el Wall Street Journal. Los patrones cambiantes de publicidad sugieren que la tecnología ya está silenciando el poder de Google.
Google tiene más del 90% del mercado de búsquedas en internet en muchos países europeos. Ya ha abordado algunas de las preocupaciones de la UE separando anuncios y resultados de búsqueda y etiquetando los mensajes comerciales. También permite ahora a las páginas web quedarse fuera de la información que muestra su buscador. Pero la Comisión todavía está preocupada por que la función de búsqueda dominante de Google produce resultados que favorecen a sus propios productos para consultar clima, mapas y productos comerciales.
La historia sugiere que las fuerzas del mercado harán que el lento avance de la burocracia europea sea en gran medida irrelevante. Microsoft luchó durante más de una década contra demandas europeas porque su hábito de unir servicios como su sistema operativo y su navegador se consideraba contrario a la competencia. El gigante del software pagó en 2009 más de 2.000 millones de dólares (casi 1.900 millones de euros) en multas.
Vuelve a haber signos de que los rivales tecnológicos están haciendo el trabajo de la Unión Europea
Sin embargo, el verdadero problema de Microsoft fue la aparición del motor de búsqueda de Google y sus nuevas tecnologías, incluyendo los navegadores rivales de Internet Explorer. La fortaleza del sistema operativo de Microsoft hizo que fuera lento a la hora de responder a la competencia.
Hay signos similares de que los rivales tecnológicos están haciendo el trabajo de la UE. Se espera que sus ingresos para aumenten menos de un 15% este año. Los ingresos brutos de Facebook están creciendo aproximadamente dos veces y media más rápido. La red social tiene más de 745 millones de usuarios que se consultan sus cuentas diariamente en sus dispositivos móviles. Esto ayuda a que los anunciantes obtengan mayor información sobre los usuarios que de la Google puede conseguir. El mayor problema de la empresa está en su patio trasero de California, no en Bruselas.