El ajuste de los precios de las casas toca a su fin... o no
Sociedad de Tasación advierte contra los inversores oportunistas Los promotores aseguran que un 30% del precio de las casas corresponde a impuestos
Llevábamos mucho tiempo sin hablar porque si lo hacíamos, parecía que éramos los malos, los culpables de la crisis, pero ahora ha llegado el momento de volver a hacerlo”. Así de contundente se mostró al término de la jornada celebrada ayer en Madrid el presidente de la patronal de los promotores APCE, José Manuel Galindo, quien se mostró convencido de que en la tan cacareada recuperación económica, los promotores inmobiliarios quieren ser un vagón más y no la locomotora del tren que debe sacar a España de la crisis.
Coincidiendo con la celebración a partir del jueves del Salón Inmobiliario Internacional de Madrid (SIMA), ayer se celebró en la capital una Conferencia Inmobiliaria con el objetivo de poner sobre la mesa qué está pasando en estos momentos en el mercado de la vivienda y qué esperan sus actores principales del corto y medio plazo.
Igual que en pleno boom, uno de los indicadores que más debate suscitó es comprobar qué están haciendo los precios de la vivienda. El presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y vicepresidente de CEOE, José Luis Feito, aseguró que si se consolida la recuperación y se “sincronizan” el empleo y el crecimiento, los precios de los inmuebles podrían volver a subir de manera “brusca” a partir de 2016; aunque en ningún caso alcanzarían tasas de revalorización de dos dígitos.
Financiación
Feito no quiso entrar en detalles sobre cuáles son los argumentos que sustentan este sorprendente pronóstico, si bien aclaró que para que esos repuntes “bruscos” se confirmen deben pasar varias cosas. Por un lado, que el empleo comience a crecer al menos al ritmo que lo haga el PIB y, por otro, que éste evolucione mejor que la población. En ese caso, es perfectamente posible, en opinión de Feito, que los precios de las casas avancen hasta un 6% o un 8% durante un par de años para después estabilizarse y ya apenas incrementarse en la misma proporción que la inflación.
En cuanto a la oferta, el responsable del IEE aseguró que el recorte de la producción todavía va a seguir siendo “brutal este año y muy posiblemente el que viene”, lo que podría explicar, aunque él no lo dijera, su pronóstico sobre los precios. Sin embargo, tal y como comentaban otros expertos asistentes a la conferencia, en realidad nadie sabe a ciencia cierta qué ocurrirá con los precios a corto plazo “y mucho menos a medio y largo”, señalaron fuentes del sector. “Quizás se trate de mensajes que lo único que buscan es convencer a la demanda solvente de que ha llegado el momento de comprar porque la vuelta a un entorno de subidas de precios es inminente”, señaló un exdirectivo de una entidad financiera.
De hecho, otros ponentes como el director general de Sociedad de Tasación, Juan Fernández-Aceytuno, aseguran que el ajuste podría tocar fondo en 2015, pero siempre en función de lo que ocurra con el mercado laboral y el acceso a la financiación. “Nosotros todavía no vemos el suelo y es importantísimo tocar suelo porque en el momento en el que empiece a cambiar la curva, las transacciones comenzarán a dispararse”, argumentó. Sobre el interés que despierta el mercado español en los fondos de inversión extranjeros, Fernández-Aceytuno subrayó que no le gusta un mercado “manejado por cowboys, que compran barato para salir en cuanto puedan. Esto no es apostar por un país”. Por ello, advirtió contra las operaciones de marcado carácter especulativo u oportunista. Como contrapartida, reclamó diseñar la “hoja de ruta” sobre cómo quiere ser en el futuro el sector inmobiliario e invitar a los inversores a participar en él y no tanto depender de ellos.
Sobre la mejora de la financiación, el director general de Sociedad de Tasación explicó que mientras no vuelva a existir mercado para titulizar las hipotecas, inversores interesados en comprar cédulas y bonos, “el crédito no volverá con la fluidez que se necesita”.
La vuelta de las grúas será síntoma de mejora
El senior advisor de PricewaterhouseCoopers (PwC) Jordi Sevilla pidió ayer que la vivienda deje de ser vista como un activo financiero y sea considerada un bien de consumo duradero.
Sevilla se mostró convencido de que sin la recuperación de la demanda interna, España no podrá salir de la crisis, pese a haber superado ya la recesión. Y sin la recuperación del sector de la construcción, tampoco. “Difícilmente se saldrá de la crisis hasta que no se vuelvan a ver grúas por ahí. Será un buen termómetro”, insistió.
Aunque recordó que en España existe un 70% de familias sin hipoteca y un 50% de los activos no ha perdido su empleo, “solo con la mitad del país consumiendo, no se volverá a tasas de crecimiento del PIB de más del 2%”. Por ello, clamó para apostar por la innovación y más incentivos para que las empresas ganen tamaño.
La carga fiscal
Un 30% es la parte del precio de la vivienda que corresponde a la carga fiscal. Por ello, las casas podrían ser casi un tercio más baratas si no pagaran impuestos, según explicó ayer la patronal de los promotores APCE.