Windsor, donde come la gente guapa de Barcelona
Ofrece una cocina catalana moderna, firmada por el chef Carlos Alconchel. En la terraza se pueden tomar platos más informales.
Señorial, a pesar de su relativa juventud. La historia de Windsor comienza en 1996, en el barrio del Eixample, con el objetivo de recuperar el ambiente elegante de los restaurantes de la Barcelona de antaño. En paralelo comienza a fraguarse otra historia, la de Joan Junyent, que por aquel entonces tenía 23 años, estudiaba en la Escuela de Hostelería de Barcelona y trabajaba como camarero en este establecimiento. Nueve meses más tarde comenzó a dirigir la sala y al año siguiente ya ejercía como director. Ahora forma parte de la propiedad y quiere darle un nuevo brío al local, con la apertura de una terraza-jardín. Lo que no ha variado en estos 17 años de existencia es el concepto de cocina catalana, revisada y de mercado, y el punto de encuentro de la clase empresarial y de la gente guapa de Barcelona.
De la cocina de Windsor se ocupa Carlos Alconchel, formado junto a Carlos Gaig y Nandu Jubany, que consigue una oferta gastronómica sencilla, fresca actualizada. El producto lo marca el mercado y es el protagonista de la mesa. En el menú se puede encontrar desde los platos tradicionales del recetario catalán, como la escudella, la carn d’olla o los canelones de la abuela con bechamel trufada, amén de la crema catalana. Dentro de la oferta también hay arroces, pescados y mariscos, guisantes de Llavaneras, colmenillas o habitas de El Prat. Se puede comenzar con un dado de atún rojo macerado, una vieira grillé con chutney de cítricos, o un asado de gambas de Palamós con alcachofas del Prat, o un meloso cochinillo confitado.
En la carta hay una serie de clásicos obligados, como la merluza de palangre con asado de alcachofas, arroz a banda, el steak tartar de filete cortado a cuchillo, los pies de cerdo rellenos de butifarra del perol o la espaldita de cordero de leche. Como broche no puede faltar la crema catalana. O la espuma caliente de chocolate con helado de pistachos, o una piña colada con helado tropical.
A diario ofrece un menú de mercado por 29,50 euros, disponible a mediodía de lunes a sábado, que cambia semanalmente. Además ofrece dos menús degustación, uno corto por 49,50 euros sin vinos (con maridaje son 71,50 euros), y otro largo por 75 euros (99 euros maridado), con un repertorio con las mejores creaciones de los últimos diez años de este local. El precio medio de la carta (sin bebida) es de 45 euros. En la terraza el ambiente es más informal, pensado para un tipo de clientela más joven, donde se puede tapear con un jamón de Guijuelo y el típico pan con tomate catalán, unas croquetas de can d’olla y jamón o unas anchoas de la Escala.
Windsor: Córcega, 286. Barcelona. Tel. 932 37 75 88. restaurantwindsor.com